El pacto de ERC y la CUP incluye otro referendo separatista antes del 2025

Cristian Reino BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

Laura Borràs, presidenta del Parlamento catalán
Laura Borràs, presidenta del Parlamento catalán Alejandro García | EFE

Borràs convoca el pleno de investidura para el viernes, pendientes de que JxCat se decida a votar a Aragonès

23 mar 2021 . Actualizado a las 10:20 h.

Poco a poco, el inicio de la legislatura catalana empieza a desencallar. La presidenta de la Cámara catalana, Laura Borràs, anunció este lunes que el viernes habrá pleno de investidura del presidente de la Generalitat. Borràs abrirá este martes con el PP (de menor a mayor representación) la ronda de contactos con los partidos para proponer el jueves un candidato a la elección, previsiblemente Pere Aragonès, que es quien tiene más apoyos después de que Esquerra y la CUP sellaran el pasado domingo un principio de acuerdo.

Se había especulado que ante la falta de pacto entre Junts y ERC, Borràs podría optar por un acto equivalente a una investidura fallida, que consiste en una comunicación a la Mesa con vistas a evitar el colapso. Pero la presidenta de la Cámara catalana cedió ante ERC, y descartó en TV3 esa posibilidad y confirmó que el viernes «habrá pleno de investidura y habrá candidato». «No habrá acto equivalente porque hay candidatos que tienen una posibilidad plausible de ser presidentes de la Generalitat», aseguró. Lo dijo en plural, pero es improbable que se refiriera al socialista Salvador Illa. ERC y Junts tienen cuatro días para cerrar un pacto. Los republicanos presionaron a los posconvergentes anunciando un preacuerdo con la CUP que podría servir de base para la negociación con el partido de Carles Puigdemont. Sin hoja de ruta soberanista, no puede haber acuerdo, llevan semanas advirtiendo desde Junts. Pero ERC y la CUP se han comprometido a «preparar las condiciones necesarias a lo largo de la legislatura para realizar un nuevo embate democrático, preferentemente en forma de referendo», una fórmula con la que JxCat podría sentirse cómodo, pues a pesar de la inconcreción no excluye la vía unilateral. 

Todo es posible

Junts ignoró este lunes el acuerdo suscrito entre republicanos y anticapitalistas y trató de trasladar toda la presión sobre ERC, a la que avisó que de aquí al viernes «todo puede pasar». Los de Puigdemont, a día de hoy, no descartan votar en contra de la investidura de Aragonès. Junts, que fijará hoy su posición en una conferencia de Jordi Sànchez, incluso dejó caer que no tendría problemas en esperar hasta finales de abril para formar Gobierno, una vez que el partido celebre un congreso extraordinario, en el que tiene previsto constituir su consejo nacional, «el órgano que ha de validar los acuerdos» de la formación, según avisaron los posconvergentes. Los de Puigdemont defienden la idea de que lo más importante es llegar a un buen acuerdo que evite que el próximo Gobierno catalán sea un «Vietnam diario o un Dragón Khan». Si antes del viernes, JxCat y ERC no sellan una alianza, el pleno de investidura acabará sin la elección del presidente de la Generalitat y los independentistas tendrán dos meses para limar asperezas.

PSC y los comunes ya avanzaron que votarán en contra de Aragonès, con lo que descartan un tripartito de izquierdas.

ERC y la CUP suman 42 escaños, sobre 135, por lo que Aragonès necesita el apoyo de Junts para salir investido.

Esquerra, aun así, se mostró optimista. «Estamos convencidos de que el acuerdo es posible», señalaron los republicanos. «Confiamos en investir esta semana a Pere Aragonès», remataron.

ERC aspira a «encajar» a JxCat en el preacuerdo alcanzado con la CUP, que las bases de la organización anticapitalista aún tienen que ratificar. Junts reclama un acuerdo a tres y pide más concreción a los republicanos sobre cuándo debería plantarse la Generalitat en el diálogo con el Gobierno central. También quieren más claridad sobre la internacionalización de la causa secesionista y sobre el papel que puede jugar el Consejo para la República de Puigdemont en el procés. ERC reniega de esta plataforma creada por el expresidente pese a que está dispuesto a «reformularla».