Los populares espolean a los alcaldes y representantes locales de los 2.248 municipios en busca de la victoria
12 feb 2022 . Actualizado a las 06:00 h.Mañana será la primera vez en la historia en la que Castilla y León celebre unas elecciones autonómicas que no coinciden con las municipales. Y eso, en una comunidad en la que el sentimiento de pertenencia brilla por su ausencia, implica un serio riesgo de que los niveles de participación se desplomen, especialmente en el ámbito rural. Otras veces el paisano acudía a votar a favor o en contra de su alcalde, y aprovechando que ya estaba en el colegio electoral, que en muchos casos puede implicar una kilometrada seria, depositaba también la papeleta en la otra urna, la autonómica.
Las previsiones han mejorado y parece que finalmente el agua no hará acto de presencia hasta el lunes, pero el invierno tampoco ayuda a salir.
En el PP se ha instalado el temor de que una participación baja abre todavía más un partido que creían ganado de antemano, por lo que gran parte de sus esfuerzos finales se han concentrado en pedir a los alcaldes y representantes locales de los 2.248 municipios, especialmente a los del ámbito rural, que hagan el puerta a puerta: a votar.
De la respuesta de los vecinos de Aveinte (a 20 km de Ávila), Villapún (Palencia) o Bernuy de Porreros (Segovia) dependerá parte del futuro de Génova a partir del domingo. Aunque Mañueco insista en que el que «se la juega» es él, y no Casado, para el líder del PP, un pacto con Vox es dañino; una repetición, pésima; y perder la Junta, un desastre.