Aragonès avisa a Sánchez: avanza hacia un referendo o habrá un Gobierno PP-Vox
ESPAÑA
Reclama la unidad del independentismo para «forzar al Estado a moverse»
15 feb 2022 . Actualizado a las 12:57 h.El presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, llamó ayer a Pedro Sánchez a «desbloquear» la convocatoria de la reunión de la mesa de diálogo para afrontar la resolución de lo que llama «conflicto político catalán». Aragonès, que pronunció una conferencia en el Museo Nacional de Arte de Cataluña en Barcelona con motivo del primer aniversario de las elecciones catalanas, advirtió de que si en la próxima legislatura hay un Ejecutivo formado por el PP y Vox, no será culpa del secesionismo, sino de la «poca valentía» de la izquierda española para pactar un referendo.
Sánchez debe entender, según dijo el dirigente de ERC el día después de la victoria del PP y el ascenso de Vox en Castilla y León, que, si mantiene el bloqueo y el inmovilismo respecto a la reclamación de un referendo, abrirá una «etapa liderada por la derecha y la extrema derecha».
A su juicio, la mesa de diálogo se encuentra en un «momento de dificultad» y esta legislatura debería empezar a «aportar resultados». Entre otros, la retirada de las causas contra el expresidente Carles Puigdemont. Avisó, además, que el diálogo no es un «peaje táctico» a pagar para favorecer la gobernabilidad española y que no está dispuesto a aceptar la negativa a negociar la autodeterminación. «Hay que activar todos los mecanismos para desbloquear la negociación», afirmó, pero sin llegar a perfilar cuál es la alternativa que propone si fracasa la mesa de diálogo.
Aragonès lanzó un aviso al presidente del Gobierno, pero también llamó a la unidad interna. Un año después de las elecciones, el secesionismo está más dividido que nunca. Las broncas internas son diarias. Tras el fracaso del procés, no han sido capaces de acordar una nueva estrategia que reactive el desafío al Estado. Aragonès apuesta por la mesa de diálogo. Pero tanto Junts como la CUP, que ni siquiera acudió a escuchar la conferencia, se han desmarcado de este foro.
En cualquiera de los casos, Aragonès, en un discurso que parecía de investidura, habló de diseño de región de futuro, de la construcción de una comunidad industrializada, europeísta, feminista, de la lucha contra el cambio climático y del bienestar, todo ello mezclado con la defensa de la amnistía y la autodeterminación.
Insistió en la «cohesión», en la necesidad de «recoser la unión de acción» del independentismo. «Dejemos de competir sobre quién es más independentista, pues el objetivo es común y no sobra nadie», dijo, pero también afirmó que es preciso que «el Gobierno haga una propuesta». La suya es reunirse con las fuerzas políticas y sociales para «reforzar consensos catalanistas». Defendió «avanzar en el derecho a decidir porque hay «una mayoría amplia que quiere votar en un referendo si Cataluña ha de ser independiente». Reiteró que ve «poca valentía del Gobierno español, que no hace una propuesta», lo que, a su juicio, «genera dudas sobre la voluntad real de resolver el conflicto». Pero también amenazó: «Si la mesa de diálogo no avanza, no nos quedaremos de brazos cruzados y hay que activar los mecanismos de presión para forzar al Estado a moverse».