Así es La Bestia, el búnker de cuatro ruedas con el que se mueve el presidente de Estados Unidos por Madrid

JUAN ROIG / SARA I. BELLED / LIDIA CARVAJAL MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Eduardo Parra | Europa Press

Algunas de las modificaciones que introdujo Biden para su vehículo blindado son un sistema de lanzamiento de granadas de gases lacrimógenos bajo el paragolpes delantero. También se colocaron ametralladoras que pueden ser disparadas sin tener que abrir puertas o ventanillas

28 jun 2022 . Actualizado a las 17:56 h.

Un enorme Cadillac circula desde hoy por las calles de Madrid. Un modelo que en cualquier otra situación sería imposible de ver, pero con motivo de la cumbre de la OTAN sirve de transporte al presidente de Estados Unidos, Joe Biden. Una mole fabricada por General Motors para los presidentes norteamericanos, afectuosamente conocida como La Bestia.

La versión actual de Biden es la creada en el 2018 para su antecesor, Donald Trump. Y esta lo seguirá siendo hasta el 2024, pues se suelen renovar cada ocho años. Muchas características técnicas, por motivos de seguridad, son top secret, aunque se sabe que comparte elementos con modelos de Cadillac y GMC, dos emblemas que se engloban bajo el paraguas de GM.

Granadas de gases lacrimógenos y ametralladoras

Algunas de las modificaciones que introdujo Biden para su nueva bestia son, según CNN, un sistema de lanzamiento de granadas de gases lacrimógenos bajo el paragolpes delantero. También se colocaron ametralladoras que pueden ser disparadas hacia el exterior, sin tener que abrir puertas o ventanillas. De hecho, todas las ventanas son fijas, debido al pesado blindaje que las protege.

Eduardo Parra | Europa Press

El conductor del Cadillac One —siempre un agente del servicio secreto entrenado en maniobras de evasión— viaja también con su propia arma reglamentaria dentro del vehículo. Según Fox News, la Casa Blanca habría pagado más de 15 millones de dólares por el desarrollo y la construcción de los vehículos. En total, podrían llegar a fabricarse hasta una docena de unidades, por lo que el coste por unidad superaría con creces los 1,2 millones de euros.

La limusina está blindada para proteger al presidente de cualquier tipo de ataque, incluso contra uno con armamento químico. El interior está sellado y sus puertas tienen un grosor de 20 centímetros. El blindaje es de tipo militar de 12,7 centímetros de espesor y los neumáticos, inmunes a los pinchazos y los disparos, podrían recorrer hasta 100 kilómetros con las ruedas dañadas. Tiene capacidad para siete personas y la parte frontal está dividida de la trasera por un vidrio. Los asientos son negros y reclinables individualmente. Incluso en una situación de emergencia, el vehículo puede ser sellado por completo permitiendo que solo agentes del servicio secreto puedan abrirlo.

Con un tanque de combustible a prueba de bombas, la limusina de 5,4 metros de largo alcanza un consumo de 63,5 litros cada 100 kilómetros ya que pesa cerca de 10 toneladas. El presidente de EE.UU. viaja siempre escoltado por una caravana de 50 vehículos que son transportados en un Boeing C-17 Globemaster III. En las visitas oficiales, viajan dos Bestias idénticas para confundir a un posible atacante.