El juez amplía la detención de Kanjaa e insiste en que fue un ataque terrorista

M. SAIZ-PARDO / J. CANO / M. BALÍN MADRID / COLPISA

ESPAÑA

Atlas

Los investigadores esperan que las 120 horas de arresto incomunicado «ablanden» al asesino. El cura herido afirma que se encuentra «dolorido, pero moralmente muy tranquilo». Algeciras registró hoy una multitudinaria despedida al sacristán asesinado en la iglesia de La Palma

27 ene 2023 . Actualizado a las 21:40 h.

El juez de la Audiencia Nacional Joaquín Gadea ha aceptado este viernes la solicitud de la Policía Nacional de prorrogar el plazo de detención incomunicada de tres a cinco días de Yasine Kanjaa, el marroquí que el miércoles por la tarde asesinó a Diego Valencia, sacristán de la iglesia de La Palma, de Algeciras, y dejó malherido a Antonio Rodríguez, párroco de la capilla de San Isidro, en la misma localidad.

Gadea, que le imputa también otros tres heridos en los ataques del miércoles, le acusa ya formalmente por un delito de asesinato y lesiones con fines terroristas contemplado en el artículo 573 del Código Penal. El mismo instructor, en el auto de registro del piso patera en el que el arrestado vivía con dos compatriotas, ya adelantó que vinculaba los ataques al «salafismo yihadista».

El instructor, que da de plazo a la Policía hasta las 19.30 horas del lunes para poner a disposición judicial a Kanjaa, manifiesta que «hay que practicar una serie de diligencias que no pueden realizarse en el período inicial de detención de 72 horas».

Falso perfil

Según fuentes de la investigación, la primera es analizar con detenimiento los pendrive y el móvil del detenido. En esos dispositivos, sobre todo en el teléfono, ya se ha constatado la intervención de Yasine Kanjaa en chats de contenido extremista en los que participaban personas de Tánger y Ceuta. También hay comentarios de apoyo al Daesh en redes sociales, exaltación de la guerra santa desde un falso perfil de Facebook o propaganda de tinte extremista, aunque bastante básica.

La segunda razón esgrimida por la policía es tener tiempo para poder hacer un examen psiquiátrico exhaustivo del detenido, que ya tenía antecedentes por trastornos mentales en Tánger.

Los servicios antiterroristas esperan que las 120 horas de detención sin abogado e incomunicado sirvan para «ablandar» al presunto asesino, ya que durante las primeras horas en los calabozos del Centro Policial de Canillas, en Madrid, los agentes apenas han logrado arrancarle información.

A pesar de los indicios que apuntan al móvil yihadista y la calificación de terrorismo por parte del magistrado, la tesis del Ministerio del Interior sigue siendo que «todas las hipótesis continúan abiertas» e insisten desde el departamento que dirige Fernando Grande-Marlaska en el supuesto desequilibrio mental de Kanjaa y en evitar calificar los trágicos hechos como «terrorismo».

Posible perturbación mental

Sin embargo, el fiscal jefe de Algeciras, Juan Cisneros, insistió este viernes en que la posible perturbación mental del detenido no elimina la calificación de acto terrorista, ya que «una cosa es el principio de culpabilidad y otra el hecho en sí cometido».

«Cuando se ha atacado a unas víctimas tan significadas por su religión, y cuando lo que se ha hecho es un ataque por motivos religiosos frente a otra religión a la que se quiere eliminar, entonces es un acto terrorista, porque es una de las motivaciones que recoge el Código Penal como acto terrorista», explicó Cisneros.

«Hay una cierta confusión cuando se dice si es delito de terrorismo y se trata de mezclar con el hecho de que la persona pudiera estar perturbada o no», señaló. La calificación del acto como terrorista no queda eliminado por el hecho de que la persona esté perturbada, «simplemente que luego a la hora de aplicar los principios de derecho penal, esta persona pueda ser absuelta y se le imponga una medida de seguridad en lugar de una pena, pero eso no elimina la calificación terrorista al acto que se ha cometido», abundó el fiscal.

Yihadista detenido en Gerona

Una operación conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil ha permitido detener en Gerona, en colaboración con el FBI, a un individuo de origen marroquí con nacionalidad española en «avanzado proceso de radicalización yihadista» y con un «perfil de gran violencia y agresividad», informa Europa Press.

Los investigadores comprobaron que visionaba la ejecución de atentados yihadistas en Europa. El mismo día de su detención, hizo búsquedas de cómo llevar a cabo apuñalamientos y atentados efectuados con este tipo de armas blancas.

El cura herido: «Me encuentro dolorido, pero moralmente muy tranquilo» 

El sacerdote salesiano Antonio Rodríguez Lucena, atacado y herido en la iglesia de San Isidro de Algeciras (Cádiz) en la tarde del miércoles, asegura que se encuentra «físicamente dolorido» pero moralmente «muy tranquilo» y que su ánimo «está fuerte» y quiere ver «las cosas positivas de la vida». El sacerdote, que fue dado de alta del hospital el jueves por la tarde, aparece en un vídeo publicado por la comunidad salesiana de Algeciras. Muestra su agradecimiento a toda las personas que le dieron su apoyo y pide que «recen por él» para conseguir «la fuerza suficiente» para seguir trabajando hasta ahora «con humildad y servicio».

«Me encuentro físicamente dolorido, lógico y normal porque todavía no han pasado ni 24 horas, y moralmente me encuentro muy tranquilo», expresó, asegurando que está «reflexionando» sobre lo que sucedió. «Mi ánimo está fuerte, no me quejo de mi estado de ánimo, quiero ver las cosas positivas de la vida», manifestó.

En su mensaje se une al dolor de la familia del sacristán de la iglesia de La Palma, Diego Valencia, de quien dijo que le unía «una muy buena amistad». «En este momento que estamos viviendo en la sociedad española, lo más importante son las respuestas de valores evangélicos de paz, concordia y amor», declaró, pidiendo que «no nos dejemos nunca abatir por las dificultades momentáneas de la vida».

Familiares y amigos portando el féretro del sacristán tras el funeral, al que no asistió ningún representante del Gobierno.
Familiares y amigos portando el féretro del sacristán tras el funeral, al que no asistió ningún representante del Gobierno. Carrasco Ragel | Efe

Multitudinaria despedida al sacristán asesinado en la iglesia de La Palma 

Con aplausos, consternados y tristes, y una oración para que la sociedad pueda desenmascarar «las causas de la violencia», la ciudad de Algeciras despidió ayer al sacristán Diego Valencia, en la Iglesia Nuestra Señora de La Palma, a cuyas puertas fue asesinado por Yasine Kanjaa.

Decenas de algecireños, autoridades judiciales, militares y civiles —entre ellas el presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno— acompañaron a la familia del sacristán, de 65 años, y a sus compañeros y amigos, en el funeral en su memoria antes de ser conducido al cementerio de Botafuegos. El obispo de Cádiz y Ceuta, Rafael Zornoza, que ofició la misa del funeral —al que no asistió ningún representante del Gobierno de Sánchez— destacó en su homilía que el dolor de la familia del sacristán es «el dolor de toda la Iglesia». El obispo llamó al perdón: «a los cristianos nos han enseñado a perdonar y a orar por nuestros perseguidores. De no perdonar estaríamos ya derrotados, habría ganado el mal», dijo en su homilía.

«Constatamos a diario una fuerte crisis de valores. Pues bien, hechos como estos nos obligan en conciencia a fomentar y a construir una cultura de la convivencia, del respeto, de la solidaridad y de la paz, evitando los odios, los enfrentamientos, los gritos, las tensiones innecesarias», clamó. El obispo ha pedido «un compromiso firme por la justicia y por la cultura de la solidaridad que alivie el rencor que tan a menudo desencadena violencia».

«Cruel y sin sentido»

El presidente de la Junta andaluza expresó su «condena más enérgica» por este asesinato «tan cruel y sin sentido». «Diego era una persona querida, valorada y comprometida, no solo con la Iglesia, sino también con cada uno de sus vecinos», subrayó Moreno. Ese cariño se vio reflejado ayer en la gran cantidad de coronas de flores encargadas por numerosas hermandades y cofradías religiosas, la asociación andaluza de víctimas del terrorismo, la Policía Nacional, los funcionarios de la cárcel de Algeciras y amigos y compañeros de los dos hijos de Diego Valencia.

La esposa del sacristán sigue ingresada en el hospital, donde recibió la noche del miércoles la inesperada noticia del asesinato.