El PP se felicita por la división en la izquierda de cara a las elecciones: «Nos va bien que se peguen»

M. E. Alonso MADRID / COLPISA

ESPAÑA

El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, durante su visita a Gijón, junto a Ángela Pumariega, candidata al ayuntamiento
El presidente del PP, Alberto Núñez Feijoo, durante su visita a Gijón, junto a Ángela Pumariega, candidata al ayuntamiento Eloy Alonso | EFE

Los populares creen la candidatura encabezada por Yolanda Díaz puede acabar siendo un problema para el PSOE

05 abr 2023 . Actualizado a las 22:01 h.

En el PP analizan las variables que introduce en el tablero Sumar, la nueva marca con la que Yolanda Díaz se lanza a la carrera por la Moncloa. Creen que la división demostrada por el espacio a la izquierda del PSOE tras la presentación de la candidatura de la vicepresidenta segunda del Gobierno les puede beneficiar electoralmente. Por un lado, por la propia ley electoral. La división en tres de la izquierda provocaría mucho voto perdido, especialmente en las provincias más pequeñas donde podrían no llegar al mínimo de votos requerido para acceder al escaño.

En las pasadas elecciones andaluzas, la división de la izquierda en dos candidaturas, la liderada por IU, apoyada por Podemos, y la otra encabezada por Teresa Rodríguez, les costó seis escaños. Si se hubiesen presentado de forma conjunta hubiesen pasado de siete parlamentarios a trece y el mapa político andaluz hubiese cambiado. El PP no hubiese alcanzado en solitario la mayoría absoluta y Vox se erigiría en árbitro de la situación. «A nosotros nos va bien que se peguen. Que se escenifique con este quilombo lo que queremos cambiar», admiten en la dirección del PP convencidos de que los españoles tomarán nota de un Ejecutivo que comenzó siendo un bipartito y ahora al final de la legislatura es «un tripartito».

El PP cree que Sumar puede ser un problema para los socialistas porque su propuesta menos escorada compite también por el electorado más centrado en la izquierda pero no para ellos. Reconocen que la candidatura de Díaz puede actuar como un revulsivo y movilizar a aquellos votantes de izquierdas desmotivados pero no consigue hacerse con el voto «desencantado» con el sanchismo al que busca seducir el PP. «Es difícil que alguien que dude entre la abstención y Feijoo vote a Díaz porque ella no es limítrofe», aseguran en el entorno del líder gallego. Sobre todo porque el electorado socialista al que se dirige el partido conservador está más cerca de los planteamientos de Emiliano García-Page, quien el pasado fin de semana ya alertó del peligro de que Díaz reste votos a Sánchez.

En Génova consideran que los votantes que en este momento se plantean cambiar su apoyo a Sánchez por Feijoo no son potenciales electores de la nueva plataforma. «Quien no quiera a Ángela Rodríguez Pam (la secretaria de Estado de Igualdad que no ha dejado de provocar polémicas), sabe lo que tiene que votar, y Díaz eso no lo puede garantizar», entienden en el PP, donde aseguran que la transferencia de voto del PSOE a sus filas no ha cesado y se sitúa en el 11%.