Sobre las discotecas siniestradas en Murcia pesaba una orden de cierre desde hace 21 meses

M. Lodeiro REDACCIÓN / LA VOZ

ESPAÑA

Vista aérea de las discotecas Golden, Teatre y La Fonda de Murcia, tras el incendio
Vista aérea de las discotecas Golden, Teatre y La Fonda de Murcia, tras el incendio Marcial Guillén | EFE

El Consistorio las acusa de incumplimiento y los locales dicen que tenían licencia

03 oct 2023 . Actualizado a las 11:23 h.

La Fonda Milagros, la discoteca donde el domingo murieron 13 personas en un incendio, no tenía licencia de apertura, según el Ayuntamiento de Murcia. De hecho, sobre ella pesaba una orden de cese de la actividad desde enero del 2022. Aun así, anunciaba sus fiestas y eventos a través de redes sociales.

El teniente de alcalde de Murcia, Antonio Navarro, (PP) explicó ayer que, administrativamente, Teatre y La Fonda Milagros eran un único local (con el nombre del primero), que tenía licencia de apertura como discoteca con cocina, pero se dividió en dos, por lo que los empresarios presentaron una modificación de actividad en el 2019 para separar los negocios y quedar como Teatre y La Fonda. En esa fecha era alcalde José Ballesta, del PP, el actual regidor, quien fue removido del sillón por una moción de censura encabezada por el PSOE en el 2021.

En enero del 2022, el Consistorio, bajo mandato socialista hasta el pasado marzo, respondió que esa división suponía una modificación sustancial de las condiciones del establecimiento y de la explotación del negocio, por lo que se instaba a solicitar una nueva licencia de apertura y no servía la que tenía la discoteca Teatre desde el 2008. Ese mismo mes, el Ayuntamiento ordenó el cese de la actividad hasta que se obtuviera la licencia. Los empresarios de Teatre recurrieron y el Consistorio resolvió denegando la actividad hasta que se analizara el nuevo proyecto.

El concejal de Urbanismo de la pasada legislatura, Andrés Guerrero (PSOE), insistió ayer en que se ordenó el cese de actividad y el cierre de ambos locales y que por tanto la responsable de lo sucedido es la empresa, que a pesar de la orden de cierre «hizo caso omiso». Su sucesor en Urbanismo, Navarro, coincidió con él e incidió en que hay un acta de un inspector, a fecha de octubre del 2022, y a requerimiento de Guerrero, en el que se refleja que el local no estaba cumpliendo con lo ordenado para que cesara su actividad. Es más, ese mes, el Ayuntamiento requirió a la Inspección de Vía Pública para que ejecutara el cese de la actividad. Pero La Fonda seguía abierta un año después.

El Consistorio, en una tensa rueda de prensa donde se le reprochó su falta de diligencia e inacción, anunció que se personará como acusación particular en la causa

La licencia se «ha quemado»

Por su parte, el abogado de La Fonda, Francisco Adán, niega que hubiera orden municipal de cese y asegura que el local contaba con licencia, aunque la documentación estaba en el establecimiento y «se ha quemado».

Asimismo, indicó que hace menos de un año la Inspección solicitó al propietario de La Fonda dos modificaciones y «se hicieron»: poner dos puertas antiincendios y quitar un objeto inflamable. También se reformó la insonorización, asegura. Y acusa de lo sucedido a Teatre. Dice que allí comenzó el fuego: «Nosotros hemos visto una serie de vídeos donde Teatre utilizó esa noche, en una fiesta Remember, cañones de fuego frío que por unas circunstancias que nosotros no sabemos suben demasiado y pueden afectar al cableado eléctrico». Añade que en esa zona «se producen las primeras llamas». Poco después, la portavoz de Teatre, María Dolores Abellán, también reseñó que cuenta con licencia municipal.

Según los bomberos, los dos locales estaban separados por una estructura de pladur. No se especificó si La Fonda contaba con salida de emergencias. No consta el aforo porque legalmente no existía, ni normativa de sistemas contraincendios.

 Cumplir con su trabajo

La portavoz de Podemos en la Asamblea Regional, María Marín, calificó las irregularidades en la licencia de apertura de las discotecas siniestradas de «gravísimas» y exigió «depurar todas las responsabilidades». «A los dueños de los locales, en primer lugar. Y también a los responsables políticos que en el Ayuntamiento de Murcia y desde que el local se modificó en el 2019 no han cumplido con su trabajo».

El magistrado del Juzgado de Instrucción número 7 de Murcia, en funciones de guardia, José Fernández Ayuso, decretó el secreto de sumario en las diligencias abiertas para la investigación del incendio.

Ayer, según informaron al juez instructor, cuatro equipos médico forenses comenzaron las autopsias para la identificación de los restos mortales. Hasta concluidas esas labores no serán devueltos a sus familiares.

El balance del siniestro es de 13 muertos tras dar con dos personas que se buscaban 

El delegado del Gobierno, en Murcia, Francisco Jiménez, confirmó ayer que el número de fallecidos por los incendios de las discotecas de la zona de ocio de Las Atalayas, en Murcia, se mantiene en 13, y que una persona que permanecía desaparecida y a la que se estaba buscando «por todas partes» fue localizada ayer a las 16.30 horas.

Jiménez señaló que él ha informado desde el principio de que se habían puesto 15 denuncias en la Policía Nacional que se corresponden con otras tantas personas desaparecidas. De ellas, 13 están fallecidas, otra ha sido identificada, pues estaba en casa de unos amigos, y la restante fue la última localizada.

«Ha habido un cruce de datos porque en el Ayuntamiento se había hablado de que habían aparecido dos personas en la playa y, en principio, se pensó que ya habían sido localizados los 15 denunciados, pero no es así», aclaró Jiménez

La anécdota ocurrió el domingo mientras el presidente de la Comunidad, Fernando López Miras, visitaba a las familias en el pabellón municipal y se presentó allí una chica a la que sus padres, desolados, buscaban. Se había ido con su novio a Elche.

Drones policiales sobrevuelan las naves para investigar las causas del suceso  

La Policía Local de Murcia está utilizando tres drones para sobrevolar las naves incendiadas para realizar labores de investigación. Además, según fuentes cercanas a la investigación, el interior de las discotecas ha sido rastreado en tres ocasiones.

Un retén compuesto por seis bomberos del Ayuntamiento de Murcia, con un vehículo, se encuentra en la zona cero de Las Atalayas en labores de prevención y a disposición de la autoridad judicial. Aunque manifestaron que en un principio «no hay riesgo de derrumbe», advirtieron que el formato y la estructura de las discotecas es similar al de las naves industriales, con techos de metal que con el calor se dilatan y pueden derrumbarse, así como al enfriarse también.