«Liquidar la España autonómica no es un precio aceptable en Galicia», advierte Rueda sobre la investidura
ESPAÑA
El presidente de la Xunta intervino en la Comisión de Comunidades Autónomas, en el Senado, auspiciada por el Partido Popular
19 oct 2023 . Actualizado a las 13:37 h.«España non se pode permitir dar pasos atrás na defensa da convivencia. Non podemos desaprender o aprendido. Non se pode chamar progreso á involución», advirtió Alfonso Rueda hoy jueves en el Senado. El presidente de la Xunta, convocado a la Comisión General de las Comunidades, intervino justo después de su homólogo de la Generalitat, Pere Aragonés. El orden lo marcó la fecha de aprobación de los estatutos de autonomía. Aragonés defendió la amnistía y un referendo de independencia como en Escocia. También la resolución del «déficit fiscal de 22.000 millones» que, según dijo, aqueja a Cataluña. Terminó y se marchó de inmediato de la Cámara Alta, casi sin que le diese tiempo a terminar el «buen día» que deseó a los demás presidentes.
Rueda empezó agradeciendo el «honor» de poder participar en el debate en la cámara territorial, «onde todos podemos falar e todos deberíamos de escoitar». No fue su única referencia al gesto de Aragonés, a quien agradeció «a súa claridade» y su presencia en el Senado: «Ten todo o dereito a expresar as súas ideas», pero «debería escoitar as dos demáis». También subrayó que no pretendía «impedir nada» ni hablar contra nadie, sino solo «en nome dos galegos». Su discurso, en el que usó gallego y castellano, se centró en la defensa del sistema autonómico, la Constitución y los intereses de Galicia.
«Ningún presidente ten dereito a gobernar contra ninguén, nin contra a Constitución nin contra os demáis territorios», advirtió andes de recordar a los gallegos que viven en Cataluña y a los catalanes que residen en Galicia, «onde nunca serán extranxeiros».
Recordó que «como representante ordinario do Estado en Galicia» lo que ocurra en otros territorios «me afecta e é da miña incumbencia». «O día que sexamos insensibles ao que ocorre a uns centos de kilómetros da nosa casa, a solidariedade entre territorios que nos manten unidos como país desaparecerá e será imposible recuperala», señaló.
Defendió el modelo gallego basado en la «estabilidad y el bienestar». También la «unidad de Galicia dentro de España». «No hemos forzado las costuras del Estado desde Galicia ni las vamos a forzar», pero por eso «nunca vamos a dejar de reclamar lo que creemos que en justicia nos corresponde».
Rueda rechazó que se pretenda que los gallegos y el resto de las comunidades asuman «lo que se debe en otros lugares donde consideraron que se podía gastar sin ningún problema porque ya se pagaría entre todos». Fue una referencia a la exigencia de los independentistas de que se condone una supuesta deuda de 450.000 millones a Cataluña.
El trato desigual no se limita al ámbito económico, criticó, sino también al político. Mientras se aplica una «escandalosa manga ancha» para «retorcer» la Constitución y «justificar lo que haga falta» para facilitar la investidura, el Gobierno se conduce con «férrea» e «inflexible ortodoxia» cuando analiza la ley del litoral de Galicia, que ha recurrido al Constitucional sin negociación previa. «Tanta mansedumbre en unas cosas y tanta mano dura con otras», reprochó.
Por eso Galicia está «muy atenta» a una redefinición del modelo territorial «interesada» porque se plantea de forma unilateral. «Liquidar la España autonómica no es un precio aceptable en Galicia para sumar una mayoría parlamentaria», afirmó, y la igualdad entre ciudadanos «no puede entrar en subasta para cálculos a corto plazo».
Aquí hay «mucho más en juego» que la «obsesión de alguien por mantenerse en el poder», dijo en una referencia velada a Pedro Sánchez, «aquí lo que está en juego es el futuro de España, y el futuro de España también es el futuro de Galicia».