Aragonès da más poder en su Ejecutivo a Laura Vilagrà, la voz negociadora con el Gobierno
ESPAÑA
El presidente de la Generalitat refuerza su Ejecutivo para afrontar el año que queda hasta los comicios, que sitúa en febrero del 2025
23 ene 2024 . Actualizado a las 22:05 h.El presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, anunció cambios en su Gobierno. El político de ERC, que fue revalidado por su partido como candidato a las próximas elecciones autonómicas, otorga más poder dentro del Ejecutivo a Laura Vilagrà. La consejera de Presidencia ejercerá ahora también de vicepresidenta del Gobierno, una plaza vacante desde la destitución de Jordi Puigneró, de Junts, en octubre del 2022. Su salida fue una de las consecuencias de la ruptura de los posconvergentes con los republicanos. El partido de Puigdemont dejó de formar parte del Gobierno ese mismo mes.
Vilagrà queda refrendada como la voz negociadora del Gobierno autonómico con el Ejecutivo nacional, una tarea que ya venía desarrollando. Aragonès dejó claro nuevamente que acabará la legislatura y que las elecciones serán «cuando toquen, en febrero del 2025 [...] Haremos nuestro trabajo hasta el último día», remarcó ayer en una intervención inusual, ya que es la portavoz del Gobierno autonómico, Patrícia Plaja, la que suele comparecer ante los medios de comunicación los martes. El presidente catalán estuvo acompañado por todos los consejeros de su Ejecutivo.
«Tenemos un año por delante para culminar esta legislatura», ha asegurado en rueda de prensa desde el Palau de la Generalitat, tras la reunión semanal del consejo de gobierno. En el año que le queda a la legislatura catalana, los retos pendientes, según Aragonès, son la sequía, implementar la amnistía, abrir la segunda fase de la resolución del conflicto y negociar una financiación singular y avanzar en el traspaso de Cercanías de Renfe.
El presidente de Cataluña también estableció los objetivos pendientes de su mandato: paliar la sequía, un referendo de autodeterminación acordado, el impulso del catalán, el traspaso de Cercanías y la negociación con el Gobierno central por la amnistía. La consejera de Presidencia, que tendrá un papel protagónico en estas conversaciones, según Efe, muchas de ellas con el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños. Es además una persona de la máxima confianza de Aragonès. «Ha llegado el momento de fortalecer, reconocer y dar máxima proyección a la vicepresidenta Vilagrà, para que la voz de Cataluña sea defendida con toda la fuerza ante el Gobierno del Estado», remarcó.
El ascenso de Sabrià
No es el único movimiento en el tablero del Ejecutivo catalán, aunque sí el más significativo. Aragonès también premia a Sergi Sabrià al nombrarle viceconsejero de Estrategia y Comunicación. Un cargo poco frecuente en el Ejecutivo autonómico, pero que permite a un veterano dirigente de ERC —ejerció de líder de la banda republicana en el Parlamento entre el 2018 y el 2021— participar en las reuniones del Consejo Ejecutivo del Gobierno catalán, si así lo considera oportuno Pere Aragonès.
Salvo un adelanto electoral, queda poco más de un año de legislatura. Para este período, el presidente de Cataluña quiere que su Ejecutivo sume «nuevas voces públicas para que su posicionamiento llegue a todo el mundo». El nuevo papel de Sabrià forma parte de esta estrategia. De hecho, Aragonès le confía proyectos «estratégicos» relacionados con los fondos europeos o el impulso del catalán, y anticipa más responsabilidades para un político que mantendrá su cargo de director Estrategia y Comunicación de la Presidencia de la Generalitat.
El presidente de Cataluña también mandó un mensaje directo a sus adversarios políticos. «Los que desean sembrar dudas, por puro beneficio electoral particular, que abandonen toda esperanza, porque este Govern culminará la legislatura. Las decisiones de hoy [por ayer] desmienten los deseos de la oposición», aseguró Aragonès. El presidente de Cataluña gobierna en minoría, solo con el apoyo de sus 33 parlamentarios, los mismos que el PSC y uno más que Junts.
«Enemigos poderosos»
Pere Aragonès también aprovechó su comparecencia para celebrar el acuerdo entre su partido, el PSOE, Sumar y Junts para «blindar y fortalecer» la ley de amnistía, frente a «enemigos poderosos que intentarán manipular y alterar el espíritu» de la norma.
La enmienda a la proposición de ley validada ayer en la Comisión de Justicia del Congreso incluye en la medida de gracia los delitos de terrorismo, salvo aquellos que atenten contra los derechos humanos. Una modificación que podría afectar a miembros destacados del partido republicano, como su secretaria general, Marta Rovira. La exparlamentaria catalana ha sido imputada por el juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón por terrorismo en el caso Tsunami Democràtic.