Puigdemont pugnará con Illa por la investidura

Cristian Reino BARCELONA / COLPISA

ESPAÑA

Puigdemont, durante la intervención de esta mañana
Puigdemont, durante la intervención de esta mañana

El expresidente de la Generalitat advierte a Sánchez de que la «estabilidad» del Gobierno estará más garantizada si el PSC se abstiene a su investidura

13 may 2024 . Actualizado a las 14:15 h.

El expresidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, ha anunciado este lunes, tras las elecciones del 12-M, su intención de postularse como «candidato» para ser investido presidente de la Generalitat. «Me veo como presidente, de lo contrario no me presentaría a la investidura, no haré teatro», ha asegurado desde Argelet, en Francia, donde Junts ha instalado el cuartel general de campaña. «La oportunidad es real, ya veremos si es viable», ha asegurado. En cualquier caso, ha precisado que los contactos con ERC ya se han puesto en marcha, a pesar de que los republicanos anunciaron su intención de pasar a la oposición, cerrando la puerta al PSC y a Junts. A Illa, en cambio, no le ha llamado. «No tengo su número», ha dicho. El líder de Junts mantiene su intención de negociar un pacto fiscal y un referendo con Sánchez.

A pesar de la victoria clara en votos y escaños del PSC, que obtuvo 42 diputados frente a los 35 de Junts, Puigdemont cree que tiene «más opciones» para salir elegido en segunda ronda que Salvador Illa. Para salir elegido presidente en primera ronda hace falta sumar una mayoría absoluta de 68 diputados como mínimo, mientras que en segunda ronda basta con una mayoría simple. Sus cuentas pasan por sumar con ERC y la CUP. Son 59 escaños, más de los que podría sumar Illa con los comunes (48) o con el PP (57). Pero si el candidato socialista sumara a la ecuación a los comunes y a los populares juntos, como en el Ayuntamiento de Barcelona, las cuentas de Puigdemont ya no saldrían. Illa puede apostar por un tripartito, si ERC se decanta por el PSC en lugar de pactar con Junts. Pero aún tendría una última opción. Sería un pacto con el PP y que Vox se abstuviera.

Si ocurriera esto, igual que si se sumaran los comunes a PSC y PP, Puigdemont ha avisado a Pedro Sánchez de que daría por incumplido el acuerdo de Bruselas (que propició la investidura del presidente del Gobierno) y Junts ya no «podría continuar» dando estabilidad al Gobierno central. «Si el PSC se abraza al PP dejará de tener sentido el acuerdo con el PSOE», ha advertido. El líder de Junts ha insistido como ya hizo ayer en reclamar a ERC que no entre en un tripartito y se sume a un gobierno de obediencia netamente catalana.

Puigdemont habla de gobiernos coherentes. Por esta razón, solo contempla que el PSC pacte con los comunes y que ERC abrace la alianza nacionalista. Para que fuera posible, el PSC tendría que abstenerse, en aras de la «estabilidad» del Gobierno español, ha sugerido, sin lanzar la amenaza explícita. Puigdemont mantiene «intacto» su compromiso de regresar a Cataluña para poder asistir al pleno de investidura, tanto si el candidato es él como si es Salvador Illa.

El líder de Junts presiona a ERC para que se sume a un gobierno de obediencia catalana y para que ignoren cualquier intención de facilitar una investidura del dirigente del PSC, aunque los planes de los republicanos pasan por pasar a la oposición. La presión también es para el Gobierno y el PSC, al meter en el mismo saco los pactos del Congreso con los de Cataluña. «Es muy pronto por decirlo. Si el PSC se abraza al PP, como ha hecho en el Ayuntamiento de Barcelona, esto dejaría sin sentido el acuerdo con el PSOE en Madrid. No me imagino a los socialistas catalanes boicoteando los acuerdos con el PSOE en Suiza, y menos teniendo el apoyo del PP, que es un partido tan malo que hizo plantearse a Sánchez su futuro»., ha rematado.

Puigdemont ha vuelto a recordar que el PP y el PSOE tienen una distancia similar en el Congreso que la que arrojan las urnas catalanas para PSC y Junts, que Feijoo no es presidente del Gobierno a pesar de quedar en primera posición y ha llamado a evitar la repetición electoral, si bien ha avisado de que cree que tendría «más opciones» que en los comicios de ayer.