Josep Rull, de Junts, presidente del Parlamento catalán gracias al apoyo de ERC y la CUP
ESPAÑA
El independentismo usa su exigua mayoría para seguir controlando la Cámara
10 jun 2024 . Actualizado a las 23:34 h.El primer pleno del nuevo Parlamento de Cataluña surgido de las urnas sirvió para constatar que el independentismo no está muerto. El bloque secesionista logró imponer ayer su exigua mayoría para mantener el control de la Cámara gracias a los votos de sus 59 diputados (35 de Junts, 20 de ERC y 4 de la CUP). Así, de los siete puestos que conforman la Mesa, Junts y Esquerra se han repartido un total de cuatro: la presidencia, en manos de Josep Rull (Junts); una de las dos vicepresidencias, para Raquel Sans (ERC); y las secretarías de Glòria Freixa y Juli Fernández.
Los otros tres son para el PSC, que, pese a ganar las elecciones del 12 de mayo, no ha podido evitar la mayoría secesionista en la Cámara. Los socialistas catalanes ocuparán una vicepresidencia, que ejercerá David Pérez, y dos secretarías, para Rosa Maria Ibarra y Judit Alcalá. Al final, los comunes, partidarios de una presidencia republicana, han acabado votando a su propia candidata, ante la negativa a ceder sus seis votos al representante de Junts. Los de Salvador Illa tampoco han buscado el apoyo de los diputados del PP, como sí hizo Jaume Collboni para ser alcalde de Barcelona. Aunque los populares hubieran prestado sus votos al PSC, la suma de ambas formaciones (57) habría sido insuficiente para superar a la mayoría independentista.
Finalmente, la Mesa de edad, presidida por el juntero Agustí Colomines, dio por válidos los votos telemáticos de los ausentes Carles Puigdemont, Lluís Puig y Ruben Wagensberg. El jefe de filas de los populares, Alejandro Fernández, anunció la presentación de un recurso de amparo ante el Tribunal Constitucional y afeó a los socialistas que no hicieran lo mismo. También Vox recurrirá la controvertida decisión de la Mesa de edad.
En cualquier caso, Puigdemont se había fijado como condición previa a su plan para intentar la investidura a la presidencia de la Generalitat disponer de mayoría independentista en la Mesa del Parlamento. La primera tarea de Josep Rull será reunirse con los representantes de los diferentes grupos parlamentarios para proponer un candidato. Sobre la mesa, Rull tiene dos opciones: el ganador de las elecciones, Salvador Illa; o Carles Puigdemont, que quedó segundo, pero que insiste en que tiene más apoyos que el primer secretario del PSC. Todo parece indicar que Rull ofrecerá el encargo en primer lugar al candidato de Junts.
En principio, el primer debate de investidura tendrá lugar el próximo 25 de junio, según marca el reglamento. Puigdemont sigue confiando en poder contar con los votos de Esquerra y forzar la abstención de los socialistas con la amenaza de retirar el apoyo al Gobierno de Pedro Sánchez. Aunque tiene pocas probabilidades de éxito, el expresidente se aferra a la idea de que un escenario de repetición electoral, con la ley de amnistía ya en el bolsillo, servirá para restituirlo en la Generalitat. Y, para esa fecha, presume que el juez Pablo Llarena le habrá levantado la orden de detención que le impide regresar a España sin ser detenido.