Ambas formaciones pactan aprobar un nuevo Estatuto con el «máximo consenso»
10 jun 2024 . Actualizado a las 23:38 h.Las delegaciones negociadoras del PNV y el PSE-EE alcanzaron anoche un preacuerdo programático para constituir un Gobierno vasco de coalición, por tercera legislatura consecutiva, que tendrá como lendakari al candidato nacionalista Imanol Pradales, y para aprobar un nuevo Estatuto con «el máximo consenso» en el Parlamento Vasco y en las Cortes Generales, según anunciaron ayer ambas formaciones en dos notas idénticas.
Este acuerdo, que ya fue comunicado a las direcciones de los dos partidos para su ratificación por los órganos internos correspondientes —la asamblea nacional del PNV y la consulta a las bases en el PSE-EE—, fija para el próximo 20 de junio la sesión de investidura de Pradales, que saldrá elegido con mayoría absoluta en primera votación, y la jura del cargo para el 22 del mismo mes en la Casa de Juntas de Guernica, en Vizcaya.
Cincuenta días después de las elecciones autonómicas, en las que los nacionalistas perdieron cuatro escaños y los socialistas ganaron dos, ambas fuerzas suscriben su tercer acuerdo bipartito desde el 2016, que se ciñe a lo programático y posterga la distribución de carteras.
Este preacuerdo, acelerado tras las europeas del domingo, que supusieron otro revés para el PNV, tiene 11 páginas y se titula Bases para el Acuerdo para avanzar en bienestar, progreso, autogobierno y la transformación de una Euskadi global. «Somos conscientes del carácter clave de esta legislatura para construir la Euskadi del futuro. Nos proponemos mejorar el nivel de bienestar de toda la ciudadanía, garantizar el progreso y la cohesión social, consolidar y profundizar nuestro sistema singular de autogobierno a través de un nuevo Pacto Estatutario», señala el texto. Ambos socios hacen una valoración «positiva» de su anterior gobierno de coalición y reconocen que este nuevo acuerdo se basa en el pactado en el 2020.
Reforma estatutaria
El documento se articula en cinco capítulos, de los que el más destacado es el que se refiere al autogobierno. Así, nacionalistas y socialistas se comprometen a completar el actual Estatuto de Guernica y unas «bases para elaborar un nuevo pacto estatutario», que partirá del acuerdo firmado el 10 de noviembre del 2023 entre PNV y PSOE para la investidura de Pedro Sánchez. Para ello, buscarán un acuerdo «lo más amplio posible, tanto en el seno de las instituciones vascas como en las Cortes Generales, para ser posteriormente ratificado por el pueblo vasco», apuntan. Algo que debería estar listo para finales del 2025.
Sin embargo, el documento no hace ninguna referencia al derecho a decidir ni a consultas «habilitantes previas» que el PNV pactó con EH Bildu en la ponencia de autogobierno y parece una apuesta por la vía de la reforma estatutaria.
También abogan por deslegitimar la violencia y se comprometen a «seguir impulsando una memoria crítica, inclusiva y ética del pasado», unas premisas que incluyen en el cuarto capítulo del texto, dedicado a la Convivencia, memoria y Derechos Humanos.
Entre las medidas sociales y económicas, ponen el foco en garantizar una sanidad «pública, universal, dimensionada y de máxima calidad»; en el acceso a la vivienda; el empleo de calidad; la reindustrialización y la innovación; y en la consecución de la neutralidad climática,
La negociación se ha llevado a cabo desde finales de abril con suma discreción, a buen ritmo e incluso ha seguido habiendo contactos durante la campaña de las elecciones europeas. Las dos partes convinieron que, en todo caso, el pacto no se oficializaría hasta pasada la cita del 9J.