Los independentistas convocan una marcha para acompañarlo hasta el Parlamento, blindado por los Mossos
08 ago 2024 . Actualizado a las 08:51 h.El expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont espera estar presente este jueves en el Parlamento de Cataluña para asistir a la investidura de Salvador Illa. El pleno comienza a las 10 de la mañana y una hora antes, a las 9, Junts y las principales organizaciones separatistas, lideradas por la ANC y Òmnium, han convocado una concentración a escasos mil metros de la puerta del hemiciclo, en el paseo Lluís Companys, con el objetivo de «acompañar» al dirigente independentista hasta el antiguo polvorín del parque de la Ciudadela, blindado por los Mossos.
A la concentración, que coincidirá con otra convocada por Vox en sentido contrario, asistirán también representantes de Esquerra Republicana y de la CUP, los exsocios de Junts durante los años duros del procés. No hay duda de que este jueves, 8 de agosto, es una jornada de alto voltaje en Barcelona, que recuerda a la de otros tiempos. En principio, los Mossos d'Esquadra, encargados de la seguridad del recinto parlamentario, son los responsables de la detención de Puigdemont, si bien la orden de detención que mantiene vigente el magistrado del Supremo Pablo Llarena obliga a su arresto por parte de cualquier agente de la autoridad que lo encuentre primero, sea mosso, policía nacional o guardia civil. Si esto ocurre y Puigdemont es detenido, el pleno sería suspendido por el presidente de la Cámara catalana, Josep Rull, también de Junts. La incógnita es por cuánto tiempo, porque en este punto, y ante lo insólito del caso, las fuentes difieren: desde 24 a 72 horas, aunque hay quien asegura que podría ser pospuesto sine die. Los socialistas han pedido a Rull que el pleno, en caso de suspenderse, se retome «en un solo día y lo más pronto posible». Tampoco está claro que pueda ser detenido en el interior del hemiciclo, ya que el Estatut lo permite solo en caso de «flagrante delito».
En cualquier caso, el regreso de Puigdemont no revertirá el apoyo de Esquerra a la investidura de Salvador Illa. Y para que no haya dudas de la solidez del pacto suscrito por socialistas y republicanos, ambas formaciones políticas firmaron ayer ante la sede de la Biblioteca de Cataluña el documento de 27 páginas (ahora sí, con los membretes respectivos) con el contenido del acuerdo, que concede a Cataluña la soberanía fiscal en un plazo de cinco años, entre otras cosas. Por parte de Esquerra, lo hizo su secretaria general, Marta Rovira; por el lado socialista, la viceprimera secretaria, Lluïsa Moret.
Porque esta vez el expresidente catalán va en serio
El líder de Junts emprendió este jueves el camino de vuelta a España, según anunció él mismo en su red social. Con una puesta en escena que no revela ni dónde ni cuándo grabó el mensaje, junto a las banderas catalana y europea, Puigdemont reitera su intención de regresar, tras casi siete años huido, para asistir a la sesión de investidura de Illa como diputado de JxCat. Y lo defiende con argumentos que podrían conducir a la presentación de un habeas corpus para eludir su ingreso en prisión. «Que yo pueda asistir al Parlament tendría que ser normal; que por hacerlo me arriesgue a una detención que sería arbitraria e ilegal es la evidencia de la anomalía democrática que tenemos el deber de denunciar y de combatir, no porque seamos independentistas, sino porque somos demócratas», señaló. En su opinión, «no hay que callar ante la actitud de rebeldía, de rebelión, en la que se han bunquerizado algunos jueces del Supremo».