El candidato a presidir la formación de los republicanos aboga por un nuevo referendo como el del 1-O
12 nov 2024 . Actualizado a las 17:23 h.Oriol Junqueras ha descartado este martes por completo que ERC entre al Gobierno de Salvador Illa durante esta legislatura. El exvicepresidente de la Generalitat ha presentado el programa con el que se presenta candidato a volver a presidir Esquerra Republicana. La formación independentista celebra el próximo 30 de noviembre su congreso interno, en el que la militancia elegirá una nueva dirección. Junqueras cesó como presidente del partido tras la debacle electoral en las catalanas. Puso fin a 13 años al frente de las siglas republicanas. Aun así, quiere volver a ser presidente y a día de hoy tiene todos los números para ganar las primarias.
Hace tiempo que se especula con la entrada de los republicanos al Gobierno de Illa, en una especie de reedición de los tripartitos de Maragall y Montilla. El aspirante a la presidencia lo ha rechazado al «100 %». «Queda descartada cualquier posibilidad de formar parte del Gobierno de la Generalitat esta legislatura», ha asegurado. Esquerra invistió el pasado mes de agosto al líder del PSC y ahora negocia su apoyo a los Presupuestos de la Generalitat. Illa gobierna en solitario y cuenta con Esquerra y los comunes como socios prioritarios. Las dos principales candidaturas que optan a presidir ERC, la de Junqueras y la de los roviristas, fueron partidarias de investir a Illa, a pesar de que el exlíder del partido se mantenga ambiguo al respecto. Solo las dos listas minoritarias se mostraron en contra de que ERC prestara sus escaños a los socialistas. La candidatura de Junqueras, en cambio, sí es favorable a la entrada al Gobierno municipal del socialista Collboni en el Ayuntamiento de Barcelona.
Junqueras, mientras, ha advertido tanto a Pedro Sánchez como a Salvador Illa, que si no cumplen los acuerdos suscritos con los republicanos, perderán su apoyo parlamentario. Esquerra, según el programa de la lista de los junqueristas, debe erigirse en la alternativa al PSC, un rol que también reclama Junts. El exdirigente nacionalista aboga en su ideario por la celebración de un referéndum como el de 2017. «Por un nuevo 1-O y un 3-O que nos lleven a la proclamación de la República catalana», recoge el programa del exvicepresidente.
Se compromete a «trabajar por un referéndum inevitable» y a «ganar estructuras de país», como una «Hacienda catalana» o la red de Cercanías. Llama a las fuerzas independentistas a «reconstruir los puentes» y a las fuerzas de izquierdas las emplaza a «construir alianzas programáticas». La ERC que propone es un «nuevo partido laborista» que sea referente de la clase trabajadora.
En clave de crisis interna, de partido, se ha comprometido a crear una «comisión de la verdad», que en un plazo de tres meses pueda esclarecer el caso de los carteles contra los Maragall y que determine quiénes fueron los responsables de crear una estructura paralela a la dirección. Además, plantea que la presidencia del consejo nacional será elegida por la militancia y no por la ejecutiva.
Junqueras parte como favorito para alcanzar la presidencia de ERC. Pero el hecho de que se presenten cuatro candidaturas atomiza el voto y los pronósticos son más complicados. El que fue líder del partido durante 13 años necesita ganar en primera ronda, por lo que debería obtener más del 50% de los votos. De no conseguirlo, habrá segunda vuelta entre las dos listas más votadas. Ahí entrarían en juego los pactos y alianzas entre aspirantes.