El independentismo catalán retrocede a su nivel más bajo en la última década, el 40 %

XAVIER GUAL BARCELONA / E. LA VOZ

ESPAÑA

Celebración de la Diada en las calles de Barcelona
Celebración de la Diada en las calles de Barcelona Quique García | EFE

Illa confirma a Junts que está dispuesto a asumir la gestión de las políticas migratorias pactada por Puigdemont con el PSOE

28 nov 2024 . Actualizado a las 09:04 h.

El apoyo a la secesión en Cataluña retrocede hasta mínimos históricos. Según el último barómetro del Centro de Estudios de Opinión (CEO) de la Generalitat, el 54 % de los catalanes se declaran contrarios a la independencia, catorce puntos más que los partidarios, que se quedan en el 40 %, el mismo que en la encuesta de junio. Este dato es el más bajo desde junio del 2015, cuando era del 43 %. El máximo apoyo a la independencia se produjo en junio del 2016 y marzo del 2019, en ambos casos con el 48 %. Sobre la relación entre Cataluña y el conjunto del país, el 34 % de los consultados prefiere que siga siendo una comunidad autónoma dentro de España, frente al 30 % que se decanta por el estado independiente.

Y entre los que se definen como independentistas, un 23 % estaría a favor de un estado federal dentro de España o de una comunidad autónoma. Según el director del CEO, Joan Rodríguez, los datos demuestran «un lento declive» del secesionismo, que «está llegando a su suelo».

El sondeo de Gesop se llevó a cabo entre octubre y noviembre pasados, a partir de entrevistas a 2.000 personas mayores de edad. El barómetro también preguntó por la actitud que deben tener los partidos a la hora de defender los intereses de los catalanes: un 85% priorizan la negociación y el diálogo, mientras que un 51% aboga por que ejerzan la «máxima presión».

Fuerte ascenso de Aliança

El CEO también preguntó por las intenciones de voto de los catalanes, seis meses después de las elecciones autonómicas que dejaron a los independentistas sin mayoría en el Parlamento y llevó al socialista Salvador Illa a la Generalitat. A grandes rasgos, el PSC se mantiene como primera fuerza en la comunidad, Carles Puigdemont retrocede después de la fuga del pasado 8 de agosto y tras recuperar la presidencia de Junts, mientras Aliança Catalana le come terreno y se dispara. Los de Sílvia Orriols triplicarían los resultados del 12-M y obtendrían seis diputados, los mismos que los socios de Sumar en Cataluña.

Lo más sorprendente es que los separatistas de extrema derecha captarían más apoyos de Vox (7 %) que de Junts (5 %), según el análisis del CEO. Illa volvería a ganar las elecciones con una horquilla de entre 39 y 42 escaños (por los 42 actuales); seguido de Junts, con 30-32 (35 tiene ahora); y les seguiría Esquerra con 20 o 21, prácticamente los mismos que consiguió el 12-M (20). En cuarta posición, el PP se quedaría con 15 o 16 escaños (15), seguido de Vox (10-11), comunes (6-7), la CUP (5-6) y Aliança Catalana (6-7).

La candidata a la presidencia de Esquerra Republicana, Helena Solà, advirtió ayer de una probable «avalancha de bajas de militancia» en función del resultado del congreso que los republicanos celebran este sábado, con tres listas disputándose el liderazgo interno. En declaraciones a Europa Press, la presidenciable de Fuego Nuevo no descartó una posible escisión en el partido. «Gane quien gane el partido está en horas bajas» y necesita el «trabajo de todos», señaló.

Rufián y Nogueras escenifican en el Congreso el abismo entre ERC y Junts

Redacción / la voz

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, se burló ayer de que Junts proclame la «mentira» de que los republicanos apoyen al Gobierno a cambio de nada cuando el Ejecutivo no ha desclasificado los documentos relativos a los atentados yihadistas que tuvieron lugar en Cataluña del 2017 como reclamaba el partido de Carles Puigdemont, un comentario al que Míriam Nogueras replicó criticando a quienes se comportan en el Pleno como en una «tertulia de bajo nivel» o con intervenciones del «Club de la Comedia».

Este cambio de impresiones tuvo lugar en el debate sobre la gestión de la dana que tiene lugar en el hemiciclo. Rufián finalizó su primera intervención con críticas a Junts. «Por cierto, los papeles del CNI, de la comisión del 17 de agosto, que iba a desclasificar el PSOE, ¿cómo van?», soltó a la «derecha catalana», como llama al grupo que dirige Nogueras.

Refriega en torno a Pujol

Además, lanzó un mensaje directo al diputado Josep María Cruset, al que reprochó que la semana pasada dijera hasta «tres veces» que ERC apoya al Gobierno de Sánchez cambio de nada, a sabiendas de que «es mentira». «Es como si yo le dijera aquí que usted vota a cambio del 3 o del 4, porque nunca quedó claro», dijo, en velada referencia a la polémica del 3 % de comisiones que presuntamente se cobraba en la Generalitat por la adjudicación de obras públicas durante los gobiernos de Jordi Pujol.

«¿Usted nunca ha votado a cambio del 3 o del 4? ¿Es mentira? Entonces, deje de decir esta mentira absolutamente miserable», reclamó Rufián, echando también en cara a Junts que lleven la cuenta de las veces que en ERC hablan en castellano en el Congreso.