Aldama declara este lunes para reafirmar su colaboración con Anticorrupción

Mateo Balín MADRID / COLPISA

ESPAÑA

El empresario Víctor de Aldama, a su salida de la cárcel.
El empresario Víctor de Aldama, a su salida de la cárcel. SERGIO PEREZ / EFE

El «nexo corruptor» detallará su grado de penetración en el Gobierno

16 dic 2024 . Actualizado a las 13:16 h.

Víctor de Aldama, el denominado «nexo corruptor» del caso Koldo, comparece este lunes en calidad de investigado ante el juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente, que instruye esta presunta trama de comisiones irregulares en contratos públicos de mascarillas valorados en 54 millones de euros. Su declaración llega cuatro días después del testimonio exculpatorio en sede judicial del exministro de Transportes José Luis Ábalos, a quien De Aldama ha incriminado en el marco de su pacto con la Fiscalía Anticorrupción.

El empresario, investigado también en otra causa por un supuesto fraude fiscal de 182 millones en la gestión de hidrocarburos, busca reafirmar su acuerdo de colaboración con la acusación pública y, sobre todo, mantener la libertad provisional. Su comparecencia llega tras la declaración que hizo el pasado 21 de noviembre en un juzgado de la Audiencia Nacional, una circunstancia que le valió su excarcelación; y, el 4 de diciembre siguiente, con la presentación ante el juez del alto tribunal de un escrito de 37 páginas y anexos con supuestas «evidencias» de sus afirmaciones comprometedoras.

En este nuevo escenario del caso Koldo, una vez que el grueso del sumario ha pasado de la Audiencia Nacional al Tribunal Supremo por la condición de aforado de Ábalos, la presencia de Víctor de Aldama en sede judicial también genera expectación por su réplica en el debate político. El empresario ha detallado determinados presuntos cohechos a dirigentes del PSOE, como su actual secretario de organización Santos Cerdán, de quien dice que le entregó 15.000 euros a través de Koldo García.

El PP, que dirige la acusación popular, tendrá un papel protagonista en el interrogatorio para que De Aldama siga tirando de la manta en busca de acorralar a su rival político. Una estrategia coincidente con la que sigue el abogado del presunto conseguidor de la trama, José Antonio Choclán, cerebro del pacto fraguado con el fiscal anticorrupción Luis Pastor.

Pero el cambio de escenario al Supremo también conlleva mayores exigencias para el arrepentido. La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil ha recibido el encargo del juez de la Audiencia Nacional de pasar el detector de veracidad a la declaración autoinculpatoria que hizo el 21 de noviembre. 

Más exigencias de la Fiscalía

Mientras tanto, De Aldama tendrá que bregar a partir de ahora con un nuevo fiscal, el jefe de Anticorrupción Alejandro Luzón, a quien se le presupone más rígido a la hora de exigir más indicios contra Ábalos o Koldo García para el mantenimiento del acuerdo. Cabe reseñar que desde que Luzón está en el cargo, la exigencia del Ministerio Público para atenuar las penas con pactos de colaboración viene condicionado por la recuperación de los activos económicos sin fiscalizar en posesión del delincuente. Y a nadie se le escapa que en el caso de hidrocarburos se estima la presencia de 74 millones escondidos aún en el extranjero

Una de las incógnitas será conocer si De Aldama persiste en denunciar contratos de obras adjudicados por Transportes que habrían sido amañados en la etapa de Ábalos (2018-2021). Otra clave es saber si contará novedades sobre su «relación especial» con cargos del Gobierno. Ya apuntó a la del exjefe de Gabinete de Sánchez y expresidente de Correos Juan Manuel Serrano, que pasó a ser reubicado como director de la Sociedad Estatal de Infraestructuras de Transporte.