Juana Rivas denuncia a su exmarido y pide que su hijo pequeño se quede con ella: «Teme por su vida si vuelve a Italia con su padre»

La Voz REDACCIÓN

ESPAÑA

Juana Rivas, en los juzgados de Cagliari, en Cerdeña.
Juana Rivas, en los juzgados de Cagliari, en Cerdeña. Jorge Ortiz | Efe

La madre de Maracena, condenada por haber huido con sus hijos en el 2017, asegura que Francesco Arcuri «coacciona y amenaza» a Daniel, de 10 años. «Le coacciona y amenaza», dice su defensa

03 ene 2025 . Actualizado a las 13:53 h.

Hace apenas un mes, Gabriel Arcuri, el hijo mayor de Juana Rivas, pedía ayuda desesperada a través de un vídeo. Lo había en la «voz» de su hermano pequeño, Daniel, de 10 años. «Estoy aquí para expresar aquello que durante muchos años no he podido expresar. Lo que mi hermano en este momento no puede expresar. Yo soy su voz».

Así volvía a la actualidad el caso de Juana Rivas, la madre de Maracena, inmersa en un largo proceso judicial desde que en el 2017 desapareciese con sus dos niños para no entregárselos a su progenitor, Francesco Arcuri, a quien denunció por malos tratos.

Ahora, Juana Rivas ha vuelto a denunciar a Arcuri por malos tratos y ha presentado un nuevo escrito ante la Corte de Apelación de Cagliari (Italia), solicitando que su hijo menor de edad permanezca en España por entender que se encuentra «en una situación de grave riesgo», en alusión al escrito de procesamiento de la Fiscalía de dicha ciudad italiana contra el progenitor por presunto maltrato a sus hijos.

La defensa de Rivas expone que «Daniel, al llegar a España, ha relatado que su padre le coacciona y amenaza», con lo que «ya se ha cursado denuncia ante la jurisdicción penal italiana», que se suma a la anterior en un juzgado de Málaga; una nueva denuncia en la que se solicita al tribunal italiano que el menor «tiene un miedo terrible a su padre y que teme por su propia vida si vuelve a Italia con él», con lo que se demanda que se le permita «poder quedarse a vivir en España con su madre y hermano» mayor.

«Además, se pone en conocimiento del Tribunal que estas navidades, Arcuri ha enviado a Juana varios mensajes intimidatorios» y, según su representación judicial, la ha sometido a un «constante acoso telefónico, intentando contactar con ella hasta en más de 40 ocasiones en una semana», atisbando un supuesto delito de violencia de género, de amenazas leves y delito de acoso.

Rivas, según sus letrados, confía en que «por fin Daniel pueda reunirse» con su hermano y con ella, «dejando atrás una de las etapas más tristes y difíciles de su vida»; asegurando en paralelo que, ante su denuncia, el Ministerio del Interior español activó el sistema Viogen «calificando el caso como de relevancia especial con un nivel de riesgo alto».

La reacción del Gobierno

La ministra de Juventud e Infancia, Sira Rego, ha mostrado este jueves su «preocupación» este caso.

«Preocupadas por la seguridad de Daniel, hijo de Juana Rivas. Los niños y niñas tienen derecho a ser escuchados. Solo así se cumple con el mandato de la LOPIVI», ha señalado la ministra en la red social X, en referencia a la Ley de protección integral a la infancia y la adolescencia frente a la violencia. Su ministerio, según asegura, está «trabajando con todas las herramientas para que así sea».

Una mensaje a la desesperada

El caso de Juana Rivas se remonta al 2017 y causó un auténtico revuelo mediático, además de un enorme debate social. Esta madre de Maracena, Granada, fue condenada a prisión por la sustracción de sus dos hijos menores en el 2017, fue objeto de un indulto parcial por parte del Gobierno de España, además de haber interpuesto recientemente una denuncia en un juzgado de Málaga contra Arcuri, por dos presuntos delitos de coacción a testigo y de amenazas ocurridos en Italia.

La situación de esta familia tomó especial relevancia a principios de diciembre cuando Gabriel Arcuri Rivas, que ya es mayor de edad, solicitó a la justicia que evitase que Daniel, de 10 años, siga a cargo de su padre, Francesco.

«Vengo a darle un mensaje directo a aquellas personas que sí pueden mover los hilos y que sí pueden hacer algo por nosotros. En el 2017 me arrancaron de mi casa, que es mi madre, a mis 11 años y a los tres años de mi hermano Daniel, el cual actualmente sigue viviendo en ese infierno que yo víví hasta los 16», explicó en un vídeo. 

Tras la petición formal, la Fiscalía de Cagliari presentó un escrito de procesamiento contra Francesco Arcuri por presuntos malos tratos. En el escrito, fechado el 14 de noviembre, se le acusa de somerte a ambos chicos «habitualmente a violencia física, vejaciones, insultos y amenazas».

«Él vive con un maltratador a su lado. Él tiene miedo de expresar estas cosas porque sabe que su padre puede enterarse de estas cosas y puede amenazarlo. Se siente en riesgo de muerte. Yo me he sentido en riesgo de muerte y mi reflejo lo veo en él», sentenciaba Gabriel Arcuri en una grabación de minuto y medio.

Y es que su situación es bien diferente. El hijo mayor de Juana Rivas regresó a España en el 2022 ya como mayor de edad. Con «dolor» dejó atrás a su hermano pequeño en Caloforte, Italia, donde vive con su padre. «No tiene ninguna referencia que pudiera ayudarlo y protegerlo de la violencia», explicó.