Esquerra enfría el optimismo del presidente socialista y deja en el aire las cuentas de la Generalitat
07 ene 2025 . Actualizado a las 19:15 h.El optimismo de Salvador Illa no será suficiente para sacar adelante la legislatura catalana. Así lo manifestó ayer la nueva secretaria general y portavoz de Esquerra Republicana, sus socios de investidura, tras la primera reunión del año de la comisión permanente del partido. «Existe una distancia bastante notable con el Gobierno de Illa», señaló Elisenda Alamany, que dejó en el aire el apoyo de los independentistas a las cuentas de la Generalitat para este año, que Illa quiere aprobar a toda costa en las próximas semanas.
A día de hoy, ni siquiera hay negociaciones formales para los presupuestos, pese a que la consejera de Economía de la Generalitat, Alícia Romero, anunció ayer la puesta en marcha de contactos con los grupos parlamentarios. «Nos sentaremos para escuchar, pero no montaremos un equipo negociador», advirtió la mano derecha de Oriol Junqueras, que ha elevado el precio del apoyo a los socialistas desde que recuperar el liderazgo de la formación a mediados de diciembre.
El reelegido presidente de Esquerra condiciona el inicio de las negociaciones al cumplimiento del pacto de investidura, en especial el punto que tiene que ver con la soberanía fiscal para Cataluña. «Esquerra tiene la máxima ambición nacional, incluso en los ámbitos deportivos», subrayó Alamany, reivindicando el independentismo de los republicanos. En este sentido, recordó que uno los acuerdos con los socialistas incluye la creación de una oficina que promueva las selecciones catalanas a nivel internacional, un punto que, dijo, está para cumplir.
«Reto gigante»
Por su parte, Romero se mostró confiada en poder recuperar la interlocución con sus socios para sacar adelante las cuentas autonómicas, pese a reconocer que hasta el momento solo se han producido avances con los comunes. En una entrevista en la televisión pública catalana, la titular de economía pidió que el nuevo modelo de financiación para la comunidad sea «muy justo, muy claro, muy transparente», y que se generen «menos desequilibrios, ineficacias y ineficiencias».
También calificó como un «reto gigante» el poder gestionar íntegramente el IRPF para el 2026, tal como figura en el acuerdo de investidura, y que el objetivo de la Generalitat de recaudar todos los impuestos es «a muy largo plazo».
Romero cargó contra «aquellos presidentes —algunos socialistas como Page — que muchas veces se rasgan las vestiduras diciendo que eso que ha pactado Esquerra con el PSC es injusto, cuando injusto es lo que tenemos ahora en que un niño de Murcia recibe 1.000 euros menos que un niño de Extremadura», al tiempo que criticó que «Cataluña sea la tercera comunidad en aportar al Estado y la décima en recibir».