La hermana de Esther López, tres años después del crimen sin resolver: «La dejaron morir de dolor»
ESPAÑA
El cuerpo de la vecina de Traspinedo, Valladolid, fue hallado en una cuneta tres semanas después de su desaparición. Los investigadores mantienen que el joven que la acompañaba, Óscar, acabó con su vida
13 ene 2025 . Actualizado a las 19:39 h.«12 de enero, mismo día, Supercopa, mismos equipos... ¿Sabéis lo que no es lo mismo? Mi vida. ¿Sabéis lo que no es lo mismo? La vida de mi hermana».
Inés, la hermana de Esther López, sigue luchando para que la atención sobre el crimen de su hermana no se desvíe. Y es que se han cumplido ya tres años desde que el cuerpo de esta vecina de Traspinedo, Valladolid, apareciese sin vida en una cuneta tras su desaparición.
Fue el 13 de enero del 2022 cuando se le perdió la pista y estuvo 23 días en paradero desconocido. «Hace justo tres años que la asesinaron intencionadamente, la dejaron morir de dolor, evitaron pedir, ni que ella pudiese pedir ningún tipo de ayuda... », continúa su hermana en una publicación en las redes sociales.
Recientemente, el Juzgado de Instrucción número 5 de Valladolid, ordenaba continuar la tramitación del presente procedimiento para que sea juzgado por un tribunal del jurado por los delitos de asesinato u homicidio dolosos, lesiones agravadas, omisión del deber de socorro, contra la integridad moral, maltrato al cadáver, secuestro, detención ilegal y contra la seguridad del tráfico. El único sospechoso, llamado Óscar S. M., sigue investigado.
La instructora considera que existen indicios de que tras estar en el bar de la localidad de Traspinedo, la víctima se fue con el investigado y otro hombre a una zona de bodegas, «para después, en el coche de Óscar S.M., dirigirse al domicilio de Carolo al lado del local La Maña de Traspinedo, donde este se baja. Óscar y Esther se dirigieron a una vivienda de Traspinedo, de la familia del investigado que éste utilizaba habitualmente, y tras estar juntos en ella, la mujer abandonó la misma a pie, saliendo él tras ella en su vehículo VW T-ROC con el que la atropelló muy cerca de ese inmueble, causándole serias lesiones, pero no la muerte».
El auto, que recoge Europa Press, apunta a que «siendo consciente de que Esther se encontraba con vida, lejos de prestar ayuda o solicitar ayuda que otros pudieran prestar, el investigado esperó entre una y tres horas hasta que comprobó que ella estaba ya muerta, procediendo a ocultar el cadáver y finalmente meterlo en el maletero de su vehículo y tirarlo, horas después, en el lugar donde fue hallado, no dando noticia directa o indirecta de donde se encontraba. Tanto Esther como Óscar habían ingerido esa noche bebidas alcohólicas».
El paso a paso de un misterio sin resolver
El 12 de enero del 2022 está lleno de incógnitas. Aquella tarde, Esther y Óscar estuvieron de copas junto a otros amigos. Consumieron alcohol, hachís y cocaína. Óscar sostiene que sobre las 3.00 horas de la madrugada dejó a Esther en una carretera, después de que ella se bajase voluntariamente del coche, porque quería marcharse andando a casa de otro amigo para seguir de fiesta. Pero la tesis de la Guardia Civil es bastante diferente.
Los investigadores apuntan a que a las 3.00 horas llegaron a la casa del investigado. «No hay evidencia de que durante el trayecto se hubiera producido una parada para que Esther se hubiera podido apear del vehículo», dice el informe de la UCO. De hecho, los teléfonos de ambos se ubican en las inmediaciones de la vivienda en torno a las 3.22 y 3.26 horas respectivamente. La Guardia Civil asume que Esther no se separó de su teléfono, ya que el terminal se localizó junto al cadáver —y su mochila— en la cuneta donde fue hallado el cuerpo. «Los posicionamientos y conexiones permiten aventurar que habría llegado junto a Óscar a bordo del vehículo de este hasta la vivienda que dispone en la urbanización El Romeral de Traspinedo», apuntan los investigadores. Pero, ¿qué pasó después?
El último atestado de la UCO avala la hipótesis de que Óscar atropellase minutos después a Esther fruto de un «arrebato en caliente» tras una discusión de origen desconocido. Según el informe policial, Óscar y el coche seguían a las 3.40 «a la altura de la parte trasera de su residencia familiar». Después, el teléfono de Óscar, según los investigadores, se sitúa dentro del domicilio. La UCO reitera que la causa de la muerte fue el atropello por un turismo, a velocidad media o baja, cuando la víctima se hallaba de espaldas, con la confluencia de otros factores como la intoxicación etílica, el consumo de cocaína y la hipotermia. Y concluye además que la mujer no murió en el acto sino que sobrevivió durante un tiempo indeterminado. Según la autopsia, la causa inmediata del fallecimiento se debió a un shock multifactorial.
El informe concluye que tras golpearla con el coche, el sospechoso ocultó el cuerpo de la víctima en el interior de la residencia familiar y la dejó morir. El cadáver habría permanecido escondido hasta que el sospechoso decidió qué hacer con él. De hecho, durante la investigación, se acreditó que el acusado realizó distintas búsquedas en Google Maps, casualmente en las que aparece el escenario en el que fue localizado el cadáver de la víctima y donde él tuvo años antes una salida de vía por circular bebido. A este respecto, Óscar no ha sabido explicar el motivo de tal circunstancia pero sí ha declarado que esas búsquedas las hace a diario, «miles de consultas», con motivo de la agencia de viajes que regenta.
El cuerpo habría sido trasladado esa misma madrugada, horas después. Entre las 6.30 y las 9.00 se activó el modo avión en el teléfono de Óscar, y también en el de Esther, casi de forma simultánea. Además, en el maletero del vehículo apareció ADN de la víctima. A la mañana siguiente, las cámaras de una gasolinera captaron al Volkswagen T-Roc entrando en el túnel de lavado. La Guardia Civil mantiene que un colgante distintivo en el retrovisor interior del coche de Óscar y su correlación con el que aparece recogido en el vídeo, «es tan elevada que difícilmente podría considerarse» que no pertenece al mismo.