Las notas manuscritas que revelan los planes del exjefe de la UDEF de Madrid que emparedó 20 millones de euros en su casa para blanquearlos
ESPAÑA

Óscar Sánchez Gil, alto mando de la Policía de Madrid, fue detenido en noviembre por presuntamente blanquear dinero procedente del narcotráfico. La investigación, que instruye la Audiencia Nacional, continúa desvelando detalles de una enorme red de blanqueo
20 mar 2025 . Actualizado a las 18:38 h.Óscar Sánchez Gil pasó cinco años de su vida como jefe de la Unidad de Delitos Económicos y Fiscal (UDEF) de la Jefatura Superior de Policía de Madrid. El suyo era un expediente notable. Antes, había pasado por la Unidad de Droga y Crimen Organizado (Udyco). Allí trabajó también varios años, en este caso dedicado a luchar contra el tráfico de drogas en internet. El pasado 6 de noviembre fue detenido con 20 millones de euros emparedados en su casa. Eran mordidas que consiguió gracias a una supuesta relación con el narcotráfico.
Este agente de 45 años, padre de dos niños pequeños y marido de otra policía fue detenido entonces junto a otras 14 personas, entre ellas también su mujer. Sánchez Gil y otros compañeros llevaban años en el punto de mira de Asuntos Internos. Los operativos constataron que al menos desde el 2019 este mando colaboraba con el gran y «casi desconocido» clan español que controla la «introducción segura de contenedores» con cocaína en los puertos españoles, desde Algeciras a Barcelona, pasando por Valencia, Málaga, Las Palmas o Bilbao. La colaboración consistía, presuntamente, en chivatazos para fijar los momentos y las rutas seguras en las que los contenedores no iban a ser revisados. De hecho, su arresto se desencadenó como consecuencia de una operación en la que los agentes incautaron de 13 toneladas de cocaína en Algeciras. Se trataba del mayor alijo de este tipo intervenido en la historia de España.
El juez de la Audiencia Nacional que instruye el caso, Francisco de Jorge, ha levantado este mes parte del secreto de una causa en la que se investiga delitos de narcotráfico, blanqueo de capitales y cohecho. Esta misma semana se produjeron dos nuevas detenciones relacionadas con la trama. Según ha podido saber El País, los investigadores que encontraron millones de euros en la casa de Sánchez Gil intervinieron también una libreta que puede resultar clave en el caso. En ese cuaderno, el exjefe habría realizado anotaciones sobre un entramado empresarial que habría utilizado para blanquear el dinero presuntamente llegado del narcotráfico. Según el mismo diario, los agentes resaltan que él y su pareja recibían fondos de una organización criminal liderada por Ignacio Torán. Ese dinero nunca llegaba por vía directa. Primero pasaba por varias empresas intermediarias que habría anotado en esa libreta. «En la libreta intervenida en el despacho de Óscar Sánchez constan numerosas anotaciones del entramado empresarial internacional. Se han identificado referencias a sociedades del entramado (Lothar y Pumba), así como a los mismos países: Panamá, Costa Rica, Suecia y Polonia», explica la Unidad de Asuntos Internos a El País. El procedimiento de blanqueo, incluía también a su cuñada — también detenida— que era la titular de 70 licencias de Vehículos de Transporte con Conductor (VTC) con las que presuntamente lavaba el dinero del narcotráfico.
Millones escondidos en macetas
Pocos días después de que la Policía Nacional irrumpiese en el chalé que Sánchez Gil tenía en el barrio de El Viso, en el municipio madrileño de Villalbilla, lo hicieron también dos grupos de saqueadores. Los intrusos rompieron la verja del chalé y varias ventanas para introducirse en la vivienda con la intención de buscar dinero olvidado por los agentes que, durante horas, tuvieron que desmontar el inmueble para seguir sacando dinero. Lo hicieron durante más de 24 horas, hasta el punto de que los funcionarios, ayudados con perros, hicieron varias excavaciones en los 60 metros de jardín, desmontaron la depuradora y usaron radiales para acceder a recovecos donde se suponía que podían haberse escondido fajos de dinero.

Según cuenta el ABC, el exagente acumulaban cientos de paquetes de dinero en un cobertizo, en un trastero, en una maceta decorativa y hasta en el interior de botes de proteína en polvo. Tantos eran los billetes almacenados en el interior de la vivienda, que no se pudo acabar de contar el dinero porque las máquinas que debían hacerlo no lo soportaron. Tres terminaron quemadas.
El flujo de cash recibía Sánchez Gil era tan enorme, que el mando guardaba en su propio despacho de la Jefatura Superior de Madrid casi un millón de euros en billetes de 500 ocultos en una bolsa. Allí, en ese mismo despacho, los agentes de Asuntos Internos encontraron también una máquina de envasar al vacío, que habría sido utilizada para envasar los billetes. «Es para guardar el jamón y el queso», dijo a sus compañeros durante el registro, según el ABC.