El empresariado catalán alerta de que Illa dirige un tripartito encubierto
ESPAÑA

Foment considera que su política traerá «más decrecimiento y miseria»
24 abr 2025 . Actualizado a las 20:53 h.La patronal catalana ha dicho basta. Foment del Treball mostró ayer su honda preocupación por la deriva de la política económica y fiscal de la Generalitat socialista de Salvador Illa, al que acusa de llevar a cabo una agenda con un «fuerte componente intervencionista y carente del más elemental ejercicio de diálogo» con los sectores afectados por sus medidas.
Es la primera vez que los empresarios catalanes alzan su voz contra el Ejecutivo del PSC, sostenido en la sombra por Esquerra y los comunes, un «tripartito encubierto» que traerá «más decrecimiento y miseria», en palabras de su presidente Josep Sánchez Llibre. Hasta tal punto ha llegado el enfado que en Foment se han puesto manos a la obra para impulsar una comisión de trabajo con todas las fuerzas políticas con representación parlamentaria en Cataluña para «proponer y valorar mejoras a las políticas económicas y fiscales del gobierno del presidente Illa». En las próximas semanas se iniciarán estas reuniones e intercambios de propuestas, centradas en la fiscalidad y el acceso a la vivienda.
La gota que ha colmado el vaso de la paciencia de los empresarios es el proyecto de ley de medidas urgentes en vivienda y urbanismo, pactado por el PSC, Esquerra, los comunes y la CUP, «el ataque más grande a la propiedad privada y a la libertad de empresa en España desde la restauración democrática», según el vicepresidente de la CEOE. Ejemplos de esta «asfixia premeditada sobre el empresario en Cataluña» son, a su juicio, la duplicación de la tasa turística o la reforma del Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y actos jurídicos documentados (ITP). «Si se multiplica por dos el gravamen del ITP con tipos confiscatorios del 20 % se hace todavía más difícil la transmisión del bien y, por tanto, el acceso a la vivienda», sostiene Llibre, una «pena económica encubierta» para los propietarios que optan por no alquilar sus inmuebles sino venderlos, añade. «Lejos de corregir disfunciones del mercado, criminalizan la propiedad privada, bloquean la libertad de empresa y erosionan la seguridad jurídica», señala rotundo el presidente de la patronal.
Ante estas medidas, Foment busca una «reacción política e institucional» para «restablecer el respeto a derechos fundamentales, como son los derechos a la propiedad y el derecho de empresa», que considera que son sistemáticamente vulnerados por el Gobierno autonómico. La entidad recuerda que más del 20 % del precio final de una vivienda es coste fiscal, incluyendo los impuestos estatales, catalanes y municipales, que con este nuevo gravamen se incrementará por encima del 25 %. En 15 años, el mercado de la vivienda en España ha registrado 47 cambios normativos, entre leyes, decretos leyes y reales decretos leyes, «una telaraña de normas que asusta la inversión y la entrada de capital extranjero, además de paralizar proyectos de construcción de vivienda», argumentó.
Acercamiento a Junts
En una entrevista en la televisión autonómica, Sánchez Llibre también abogó por un acercamiento de los socialistas catalanes a Junts: «Ojalá fuera así», dijo en respuesta a una pregunta en este sentido. De hecho, el máximo dirigente de Foment mantiene una relación fluida con Carles Puigdemont, con quien llegó a entrevistarse en Perpiñán hace ahora un año, en plena precampaña de las elecciones catalanas. Algo que le acarreó entonces no pocas críticas en el seno de la CEOE.