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La mayoría de empresas privadas son pymes y son de carácter familiar. Apostar por ellas y apoyarlas con financiación y asesoramiento supone un impulso lleno de valor, tal y como demuestran testimonios como el de Gloria Millares, gerente de una empresa lucense de maquinaria agrícola

En un sector tan masculinizado como es el de la agricultura, destacan casos como el de Gloria Millares. Ella es la cabeza visible de Millares Torrón S.L., empresa dedicada a la venta y asesoramiento de maquinaria agrícola que ha ido siguiendo el legado dejado por su padre hace años. Para entender la vinculación que las empresas familiares tienen como sustento de la economía, conviene conocer algunos datos.

Por ejemplo, que en España el 90% de las empresas privadas son familiares, generan casi el 70% del empleo privado y aportan cerca del 60% del PIB según datos del Instituto de la Empresa Familiar. Y hay un dato muy relevante que añadir, y es que la mayoría de esas empresas familiares son pymes. Contribuir al avance y desarrollo de compañías de pequeño y mediano tamaño se presenta vital para garantizar no solo su continuidad, sino para brindarles la oportunidad de poder avanzar al igual que lo pueden hacer las grandes empresas e impulsar el progreso económico del país.

Ese apoyo se materializa a través de ayudas vinculadas con la financiación y el asesoramiento empresarial que permitan a estas compañías de reducido tamaño no tener que renunciar a la digitalización o la internacionalización. En Millares Torrón S.L. conocen muy bien la importancia del acompañamiento empresarial y es por ello que agradecen el haber recorrido parte de su camino de la mano de Banco Santander.

Gloria Millares sabe de sobra lo que es el sacrificio, pues se lo han inculcado desde pequeña cuando su padre no regresaba a casa hasta la medianoche o incluso la madrugada, tras recorrer los lugares más recónditos del rural gallego.

Tras el relevo generacional que se vivió en la familia de Gloria Millares, se dieron también muchos cambios. Su padre dio paso a Gloria y a su hermano José Ángel hace más de dos décadas para que tomaran las riendas del negocio familiar. ¿Qué han conseguido desde entonces? Una organización moderna y equilibrada “donde los distintos departamentos engranan perfectamente. Las ventas de maquinaria están respaldadas por unos servicios de recambios, taller y administración realmente efectivos que hemos ido mejorando y puliendo día a día”. Con una plantilla consolidada y responsable, Millares no deja escapar la oportunidad de comentar el compromiso y la actitud de sus trabajadores a pesar del aspecto familiar de la empresa. Precisamente, la unidad y la mirada colectiva que caracteriza a su equipo humano han hecho que desde Millares Torrón S.L. puedan considerar a los trabajadores como parte de su familia.

Para dedicarse a este tipo de negocio enfocado en el sector primario, la máxima de Millares Torrón S.L. es la de ofrecer confianza y certeza. “Confianza, en la calidad del producto que van a adquirir, pues es su medio de trabajo y sabemos que la maquinaria va a estar sometida a unos altos índices de exigencia. Las condiciones climatológicas imponen los ritmos y los tiempos en que se tienen que ejecutar las tareas. Y certeza, en cuanto que tienen que tener la seguridad de que van a poder disponer de un servicio efectivo tanto de reparación como de repuestos y de gestión en las operaciones financieras que llevan asociadas”. Gloria no quiere pasar por alto la implantación de alta tecnología en la maquinaria agrícola, “como es el caso del uso de software avanzado que simplifica y digitaliza el trabajo, de los sistemas GPS en empleados para optimizar el rendimiento de la maquinaria, tanto en tractores como en aperos, así como de la constante innovación en los motores, que ha conseguido reducir de manera muy significativa la emisión de gases, contribuyendo de este modo a ser respetuoso con el medio ambiente”.

Por suerte, la pandemia no les ha afectado con tanta dureza como a otros sectores. La agricultura fue declarado servicio esencial durante el estado de alarma por lo que desde Millares Torrón S.L. pudieron seguir dando servicio a todos los agricultores de la zona, ya que la única limitación que tuvieron fue la de movilidad con los cierres perimetrales. Y es aquí cuando Gloria no duda en poner en valor “el compromiso social que asumieron los agricultores, lo cual siempre deberíamos agradecer, de abastecer a los mercados para que la población no sufriese en ningún momento escasez de productos de alimentación”.

Los servicios financieros que Banco Santander ofrece a pymes como la de Gloria Millares facilitan tanto su día a día como las operaciones de gran calado. “Es el caso de las pólizas de crédito o confirming, unos instrumentos de financiación que nos resultan muy útiles como respaldo para materializar ciertas operaciones con nuestros proveedores”.

Aparte de estos servicios, “nos han concedido sistemas de financiación para efectuar inversiones permanentes que necesitábamos con el objetivo de expandir y ampliar nuestro negocio”. Es aquí donde agradecen inmensamente los consejos recibidos “a la hora de decidirnos por productos que nos pueden resultar más ventajosos y me gustaría destacar su labor durante la pandemia, en la que se volcaron en informarnos, asesorarnos y agilizar todo tipo de trámites para que siguiésemos adelante, en medio de una situación de incertidumbre desconocida hasta entonces”.

Aunque si algo tienen forjado a fuego en la compañía liderada por Millares Torrón es que el crecimiento de la empresa debe realizarse “de una manera gradual y con pasos firmes”. La ambición y el camino que continuamente recorren para ofrecer un mejor servicio no les impide que desde la dirección tengan claro que uno de sus objetivos irrenunciables es mantenerse como una empresa “sólida, equilibrada, de acuerdo con nuestro tamaño y capacidades”. Estos valores son los que hacen que Banco Santander confíe en su solvencia y crea en el plan comercial que han trazado. “El contar con su apoyo nos permite alcanzar metas, que de otro modo, se postergarían en el tiempo o que en algunas ocasiones no se llegarían a producir”, obstaculizando el crecimiento natural de la empresa.

“Por otro lado, las intervenciones y la manera de actuar de Santander en las operaciones financieras que llevamos a cabo han sido muy importantes para conseguir que se materialicen de un modo razonable y ventajoso para el cliente. Para llegar a conseguir eso es necesario que la entidad de crédito conozca el sector, lo entienda e incluso empatice con él, y en la medida de nuestras posibilidades, Millares Torrón, S.L, ha intentado contribuir a que eso sea así.”

En definitiva, los agricultores necesitan comprar maquinaria y tener un servicio de calidad para poder llevar a cabo sus trabajos con garantía. Sin embargo, sus ingresos no siempre son los mismos en las diferentes campañas: la climatología o las propias condiciones variables en el mercado de los productos que cosechan o que necesitan adquirir para el funcionamiento de sus explotaciones suele ser irregular. Además, sus ingresos los obtienen con la venta de sus productos al finalizar sus campañas, mientras que al inicio de las mismas tienen que hacer frente a gastos importantes. Es precisamente por eso que sin el apoyo firme de entidades de crédito implicadas en este sector, en muchas ocasiones no se podrían llevar a cabo las operaciones. “Por suerte, una actitud comprometida y de confianza del Banco Santander en nuestros agricultores y sus posibilidades ha permitido que estos lleven adelante sus proyectos”, concluye Gloria Millares.