FÚTBOL / RACING En los últimos años, al Sporting no le ha podido ir peor. Pasa por una crisis deportiva, económica, social y de indentidad. El equipo vive su tercera campaña consecutiva en Segunda, acumula una deuda de unos cinco mil millones de pesetas, pierde respaldo ciudadano, con unos diez mil aficionados en cada partido, y sufre el constante éxodo de las principales figuras de su cantera.
24 may 2001 . Actualizado a las 07:00 h.La madre de todos los problemas es la deuda económica. Acumula un agujero de cinco mil millones debido a que cierra presupuestos de dos mil kilos y luego no ingresa más que seiscientos. Eso como poco, según reconoce el consejo de administración del Sporting. Para cuadrar las cuentas ha recurrido desde hace años a la venta de las mejores promesas que salen de su cantera de Mareo. Así, decenas de futbolistas formados en Gijón triunfan en otros conjuntos de Primera. Entre los más destacados, en esta década, se encuentran Luis Enrique (se fue al Madrid en el 91), Manjarín (Dépor, 1993), Iván Iglesias (Barcelona, 1993), Abelardo (Barça, 1994), Juanele (Tenerife (1994) y Tomás (Celta, 1997). En los últimos años, las cuentas rojiblancas se han empezado a ajustar algo más. En la penúltima temporada ingresó unos seiscientos millones por el traspaso al Celta del central Sergio Fernández. Y en la última campaña también recalaron en Vigo los defensas Iago y Manolo, cuya venta le reportó unos quinientos kilos, idéntica cantidad que pagó el Atlético de Madrid por hacerse con los servicios del portero Sergio Sánchez. Pero mientras, en lugar de ajustar los gastos con el concurso casi exclusivo de jugadores de la cantera, recurría a jugadores foráneos. De hecho, cuando el Sporting visitó Ferrol en la pretemporada, contaba con seis extranjeros y cuatro comunitarios. El resultado de esa extraña apuesta es la continuidad del equipo gijonés, por tercera campaña consecutiva, en Segunda División. En el capítulo económico, el club todavía espera ingresar ochocientos millones de un litigio que mantiene con Audiovisual Sport por sus derechos de retransmisión televisiva, de la misma forma que ya recibió 150 por una disputa del caso Pier.