FÚTBOL / RACING
04 abr 2002 . Actualizado a las 07:00 h.El Racing, fundado en 1917, es uno de los históricos del fútbol gallego. Tiene un vasto palmarés de triunfos a sus espaldas, aunque su gran sueño es la Primera División. Este mes de abril se cumplen cincuenta años de su mejor posibilidad de llegar a la élite. El 15 de abril de 1952, tras un meritorio empate a dos goles en Lleida, el Racing conseguía una plaza para la promoción de ascenso a Primera. Fueron recibidos en Ferrol como héroes, con más de 7.000 personas en la plaza de España esperando su regreso, entre ellos, el alcalde de Ferrol, Alcántara Rocafort. Fue la temporada 51/52 en la que el Barcelona logró el título de Liga en Primera División con tres puntos de ventaja sobre el Athletic de Bilbao y cinco sobre el Madrid. Bajaban directamente a Segunda División, Las Palmas y Atlético Tetuán. Mientras que el tercero y cuarto por la cola, Gijón y Santander, tenían que disputar una promoción. Había dos grupos de Segunda, en el primero de ellos el campeón fue el Oviedo, seguido por Logroñés y Racing. En el segundo el campeón fue el Málaga, seguido por Mestalla y Alcoyano. Los campeones de cada grupo, Oviedo y Málaga, ascendían directamente a Primera, ocupando la plazas de las Palmas y Atlético Tetuán. Mientras que los clubes clasificados en segundo y tercer lugar promocionaban. El Racing participó en una liguilla de ascenso a Primera con Mestalla, Gijón, Santander, Alcoyano y Logroñés. Los dos primeros ascendían. El primer partido lo disputaron en Valencia, donde perdieron por 4-0 frente al Mestalla. Los levantinos lograron los cuatro goles en los quince últimos minutos. La alineación racinguista fue: Manel; Sobrino, Malet, Anca, Artime, Perniche; Larrosa, Calviño, Guimaráns; Alvarito y Tilve. El portero Manel, así como Calviño y Alvarito fueron los destacados. En la segunda jornada el Racing vencía en casa al Alcoyano por 1-0, tanto anotado por Alvarito, y en la tercera logró un valioso empate a un gol frente al Logroñés, tanto que también marcó Alvarito. Los ferrolanos se destacaban en la clasificación, aunque en la siguiente jornada el Santander les venció por 7-3. Los racinguistas no merecieron la goleada recibida, aunque el equipo falló en defensa. En la siguiente jornada viajaron a tierras asturianas para enfrentarse al Gijón, donde perdieron por 2-1, en un partido que acabaron jugando con diez por la lesión de Sabino. En la sexta perdieron en casa frente al Mestalla por 1-4. Fue el resultado que los alejó del ascenso. Juan anotó el tanto ferrolano. Ya sin opciones jugaron en casa del Alcoyano, donde perdieron por 4-3. En la octava rompieron su mala racha con un triunfo en el Inferniño frente al Logroñés por 2-0, un partido en el que hubo una gran actuación de Fabeiro. En la novena jornada el Racing perdió en Santander por 10-0 y en la décima y última ronda el Racing perdió en casa frente al Gijón por 1-3. La clasificación final de la liguilla fue: Mestalla, 14 puntos; Gijón, 13; Santander, 11; Alcoyano, 9; Logroñés, 8 y Racing, 5. El Mestalla no pudo subir por ser filial del Valencia, por lo que el premio fue para Gijón y Santander.