Análisis | Así está la conexión de la comarca con la primera ciudad de España Sin emplear el coche particular, la tercera área urbana de Galicia es hoy la peor comunicada con la capital, a donde emigran alrededor de 150 ferrolanos cada año
08 abr 2006 . Actualizado a las 07:00 h.?aso práctico: tres amigos salen de Ferrol a la misma hora con destino a Madrid. Javier emplea el tren, Eloy irá en autobús y Olga opta por el avión, en A Coruña, desplazándose hasta allí en su propio vehículo. Esta última, tras aparcar en Alvedro con 45 minutos de antelación, embarcará y -si no hay problemas en la T-4- arribará al paseo de Recoletos unas dos horas y media más tarde. Aún le dará tiempo para aguardar al primer amigo viendo la exposición de Rembrandt en la Biblioteca Nacional. Eloy, el que llega por carretera, se reúne con Olga siete horas después de haberse despedido en la plaza de Armas. Y aún les quedará aguardar casi otras cinco horas para reunirse con Javier, que viene con Renfe, en un tren que tarda doce en recorrer los cerca de 700 kilómetros que distan en la tercera área poblacional gallega y la capital española. Así se resumen hoy las conexiones que tiene Ferrolterra con Madrid. Unos enlaces que han mejorado sensiblemente por carretera tras la apertura de la autovía Fene-Ferrol, que permite llegar hasta la M-30 sin parar ante un semáforo y siempre con doble carril. Pero aún podrá ser mejorada cuando se complete el eje Ferrol-Vilalba que hoy pende de los últimos tramos. Motivará un ahorro de tiempo, kilómetros y dinero: sólo habrá que pagar un peaje, el de Guadarrama (ocho euros), en lugar de los tres actuales por Guísamo (casi doce en total). Sin olvidar nunca que Ferrolterra, con 170.000 vecinos, fue el último punto en unirse al eje atlántico por autopista. En ese vagón de cola se quedará también para la llegada de la alta velocidad ferroviaria. Pero hasta entonces resulta casi una hazaña completar el (único) trayecto en ferrocarril entre la urbe naval y Madrid: once horas. Este medio de transporte según Renfe va con el 60% de sus plazas cubiertas, pero de momento la empresa no se ha planteado mejoras en su línea o en sus frecuencias. Sólo unos arreglos estéticos en su interior, según una reciente respuesta oficial al BNG. La mejora llegará, sí, pero sólo con el AVE. Atendiendo a los últimos compromisos oficiales, desde la comarca se podrá llegar en el 2009 a Madrid en dos horas y 59 minutos. Así lo prometieron primero la vicepresidenta De la Vega, en Ferrol, y la ministra Magdalena Álvarez, después en el Congreso. Huesca, con menos de 50.000 habitantes, dispone ya de dos enlaces diarios con este tren. Aunque no hace falta irse muy lejos para ver una comparativa de servicio público de viajeros a la capital del Estado: Lugo tiene sólo un tren diario, sí, pero otras 6 comunicaciones por autobús; Ourense, otras 3 en tren; Santiago, 6 con la empresa Alsa y 3 con Renfe, las mismas que A Coruña; Vigo, media docena en autobús y 3 en ferrocarril... Por el aire Sin contar que estas tres ciudades disponen de aeropuerto y al menos media decena de conexiones diarias en el peor de los casos. A los ferrolanos casi les compensa acudir a Alvedro o Lavacolla para llegar a la primera ciudad de España: de hecho, si se valen de una buena oferta, la ida y vuelta con Iberia o Air Europa les sale más barato que el trayecto en tren (cuesta 54,2 euros sólo la ida). Y con un ahorro de ocho horas. Aunque hay que sumar el desplazamiento hasta la terminal (35 kilómetros el más próximo, el de A Coruña) y abonar nueve euros al día por dejar el coche en el aparcamiento. «Menos aeropuerto, lo tenemos todo», dijo ufano Juan Juncal cuando el Gobierno de Aznar aprobó el Plan Galicia. Igual era lo que faltaba. Pero, ¿hay demanda de viajeros entre las dos ciudades? Sí, atendiendo a varios indicadores, como la ocupación ya citada de los vagones de Renfe, o que cada año alrededor de 250 ciudadanos se dan de baja en el censo de una urbe para irse a la otra comunidad. En el 2005, según los datos de Estatística del Concello, el año pasado 132 vecinos solicitaron el cambio de registro de Ferrol para hacerlo en Madrid; y al contrario, otras 103 personas. En el 2004 fueron algo más. Al final, una media de 150 cada 12 meses. AVE, conexiones viarias... Obras todas pendientes que se comprometieron en el 2001 por el anterior Gobierno gallego y que deberían estar finalizadas en un año, según el cronograma que aprobó el entonces conselleiro Xosé Cuíña. Son las mismas infraestructuras que ahora, justo cinco años después, siguen reclamando alcaldes y vecinos.