El avilesino formado en el Barça B suma seis goles. Apasionado de los coches, lidera al Salamanca, donde espera retirarse
22 dic 2007 . Actualizado a las 02:00 h.A punto de cumplir 35 años, Quique Martín vuelve a lucir como referencia del Salamanca. En su tercera etapa en el club, suma seis goles pese a no jugar en punta. El habilidoso futbolista asturiano formado en la cantera del Barça, es el preferido de El Helmántico. Allí ya le marcó al Racing.
Después de tres temporadas en el filial del Barça, dio el salto a Primera para jugar en aquel Mérida de Sergio Kresic, con el que jugó luego un año en Segunda y marcó quince goles. Esa experiencia le valió el salto al Espanyol, con el que jugó más de medio centenar de partidos en la liga de las estrellas.
De Montjuic, pasó al Helmántico, al que llegó por primera vez con 26 años. La historia de amor de Quique Martín con la Unión Deportiva se entiende más al estar casado con una mujer salmantina. 18 goles en un par de temporadas en Segunda le valieron el regreso a Primera con la camiseta del Villarreal. Pero volvió a continuación a Salamanca y jugó las dos siguientes campañas en el Terrassa. En el verano del 2006 y después de rechazar ofertas superiores económicamente, abrió su tercera etapa en la ciudad del Tormes.
Once goles la temporada pasada demuestran que conserva el instinto goleador pese a jugar como media punta, sobre todo por la izquierda. Se encarga de sacar las faltas y lidera al equipo dentro del campo.
Apasionado de los coches, hasta seis se le vieron a Quique Martín en los dos últimos años. Padre de dos hijos, tiene sus nombres tatuados por el cuerpo. Ídolo de la afición del Helmántico, termina contrato en junio, pero confía en poder retirarse -más adelante- en el equipo salmantino. Porque la edad parece no afectarle. Es el segundo jugador que más minutos disputa de su equipo (1.440), sólo superado por el defensa David Catalá.