Es gallego de pura cepa, del ferrolano barrio de Caranza para más señas, pero cuando la música suena en la pista Antonio Cabanas parece un verdadero cowboy americano. Se mete en el papel con unas botas camperas de punta, unos jeans ajustados, y un sombrero vaquero. Y lo que es más importante: Antonio ejecuta a la perfección los pasos del line dancing , ese baile que pone en fila a los amantes del country y que seguramente ustedes habrán podido contemplar en películas made in USA muchas veces. Esta danza se empezó a introducir en España hace unos ocho años -coincidiendo con aquel exitoso No rompas más mi pobre corazón , de Coyote Dax (¿se acuerdan?)- y en Valencia y Cataluña hizo furor. En Galicia apenas se practica, pero en Ferrol ha conseguido hacerse un hueco en el gimnasio Ritmos de Caranza, donde cuenta con un pequeño club de forofos. Hace algún tiempo, Antonio Cabanas se marchó a Estados Unidos para hacer un curso de y, allí, por casualidad, descubrió el baile en línea. Como es muy concienzudo y perfeccionista, el monitor asistió a numerosos cursillos para aprender todos los secretos de la danza vaquera y hace pocos meses empezó a enseñárselos a un grupo de alumnos. Antonio asegura que en el line dance todo son ventajas. «Para bailarlo no hace falta pareja, es fácil de aprender y lo pueden practicar personas de todas las edades», me explica el monitor. También me cuenta que no siempre se baila al son del country -admite otros muchos estilos musicales- y que tiene su origen en las danzas tradicionales irlandesas. Ya saben: si les va el espíritu Nashville, no tienen más que darse un paseo por Caranza y buscar a Antonio.
Los cowboys norteamericanos bailarán muy bien, pero no saben lo que se pierden al no poder probar los deliciosos grelos de Xestoso. Este exquisito manjar de las tierras de Monfero llega hoy a esta página porque el pasado miércoles se presentaron en el Hotel Atlántico de A Coruña las jornadas gastronómicas dedicadas al grelo de Val Xestoso . Atentos a lo que viene a continuación, porque seguro que se les va a hacer la boca agua. Grelos en dulce con chocolate templado (del cocinero Alejandro López González ), montaditos de chicharrón; y grelos con muselina de patata acompañado de canelón de crema de grelos (de Vanessa Areas ); o pudin de grelos, gambas y salmón (de Victoria Nieto ), son solo algunos de los suculentos platos que los restaurantes Casa Peizás de A Capela; La Fragata, del Parador de Turismo de Ferrol; y los coruñeses Prada a Tope y el propio NH ofrecerán a sus clientes hasta el próximo día 27 de enero. El alcalde de Monfero, Andrés Feal , como buen embajador de su tierra, no quiso faltar a la presentación de las jornadas.
Y de los grelos pasamos al surf. Les cuento: el director comercial en España de la firma O'Neill , José Lozano , ha visitado esta semana nuestra comarca para cerrar varios acuerdos con el Club de Surf Pantín . La firma acaba de suscribir un contrato de colaboración por el cual se verán beneficiados los socios y alumnos del club de Valdoviño. Entre otras cosas, y gracias a este acuerdo -según me ha contado Marcos Rodríguez , gerente del club-, O' Neill llevará a Valdoviño a algunos de los mejores monitores de su Surf Academy para dar clase a los alumnos de Pantín, suministrará a la escuela todo tipo de material y llevará a algunas de las jóvenes promesas de la comarca a los cursos que organiza por toda España. Además, la firma ha llegado a un preacuerdo con el Club de Surf Pantín para unirse al grupo de patrocinadores que apoyan el célebre campeonato del Pantín Classic .
Y hoy me despido hablándoles del músico y pintor Eduardo Hermida . ¿Por qué? Pues porque el ferrolano es noticia por varias razones. El primero: porque mañana, en la galería Sargadelos , impartirá un taller en el que hablará a los niños sobre Punver -el cuento de Iolanda Castaño que ha ilustrado- y les enseñará a hacer dibujos con mariquitas. El segundo: porque allí mismo, en Sargadelos, se puede ver su exposición aPOPloxías . El tercero: porque está preparando dos nuevos libros ( Feito a man , para niños, y A terra durme , un poemario de Guillermo Lorenzo al que pondrá dibujos). Y el cuarto y último: porque a principios de febrero inaugurará en la Casa de Cultura Pintor Lloréns de Sada una nueva exposición pictórica con muchas motos, muchos bodegones y algunas flores. Así que ya me dirán si no había motivos para hablarles de este hombre que es un todoterreno. Y ahora llega el final. Echan el cerrojo y me cierran la Mirilla. Así que hasta mañana a todos.