Los investigadores inician el análisis de los supuestos cañones de la «Ragazzona»

El equipo de investigación de la Universidade de Santiago de Compostela que a comienzos de marzo rastreó la ría en busca de restos de la Ragazzona -el mayor navío de la mal llamada Armada Invencible- continúa con su tarea después de haber realizado el trabajo de campo.

Tras una semana de inmersiones en la zona de Cariño, con el apoyo de la Armada, se determinó, a grandes rasgos, que la ausencia de restos de cerámica o madera apunta a un expolio anterior.

También se confirmó la existencia de piezas de artillería -cañones- que, al menos, son anteriores al siglo XVIII y corresponden a un naufragio. La Ragazzona se hundió en la zona en 1588 y, por lo tanto, las tareas se centrarán ahora en establecer una correspondencia cronológica. En otras palabras, determinar si los supuestos cañones del navío de la Gran Armada son de la época de su naufragio o posteriores.

El director del proyecto de campo, David Fernández, indicaba ayer que para ello, entre otras medidas, se establecerán paralelismos con otros restos de artillería de la Armada Invencible que se conservan en Irlanda, Escocia o Portugal. Si esas correlaciones son buenas «podría determinarse una datación más exacta de los restos y su identificación positiva como pertenecientes a la capitana de la Escuadra de Levante».

También se están consultando numerosas fuentes documentales históricas -otra parte del trabajo- sobre el naufragio de la Ragazzona.

Localización exacta

La tarea está resultando compleja y, como detalló David Fernández, «surgen dudas sobre el lugar exacto de la ría ferrolana donde se hundió el navío» después de haber sido azotado por un temporal y maltrecho ya por la campaña bélica.

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