
La intensidad del mar deja al descubierto el mineral oscuro que hay en el subsuelo
08 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Los bañistas de la playa de Santa Comba se han encontrado este arranque de verano con una sorpresa. La habitual playa de arena blanca paradisíaca ha mutado en una de arena negra. ¿El motivo? Los minerales oscuros que se acumulan debajo por su densidad procedentes de la erosión de piedras y materiales. «Son minerais pesados, máis resistentes física e quimicamente», explicó el geólogo Francisco Canosa, y están depositados debajo de la habitual arena blanca. El delegado de la Sociedade Galega de Historia Natural, Xan Rodríguez Silvar, aludió a los ciclos naturales de la dinámica marina. Así, durante el invierno el oleaje suele ser mucho más fuerte e intenso por lo que es más fácil que arrastre mayor cantidad de la arena blanca que se deposita en la superficie de la playa, dejando al descubierto la negra. Sin embargo, este verano ha arrancado con una falta importante de esta arena blanca que, apuntó Canosa, va volviendo con el oleaje menos intenso.
Este color se lo dan los diferentes minerales acumulados. «Os negros son magnetita e ilmenita, os rosados (granates), os de cor laranxa (estaurolita), os verdes (anfiboles) e os brancos e amarillentos (circón e apatito)», apuntó el geólogo. Al incidir la luz la arena negra despliega un abanico de reflejos de estos colores.,
Aunque algunos inviernos se ha podido apreciar este fenómeno incluso con más intensidad -los fuertes temporales del 2013 dejaron las playas de Santa Comba y Ponzos completamente negras- lo cierto es que llama más la atención en verano cuando la zona se llena de bañistas. No obstante, reiteraron que este tipo de arena no es tóxica ni produce ningún problema para los bañistas. «A nivel do norte de Galicia, as praias de Santa Comba e Ponzos son as que máis depósito de minerais pesados teñen», señaló Canosa, aunque parte de este material puede proceder de la costa del Ortegal, apunta.