Un crac del fútbol en el salón de casa

FERROL

JOSE PARDO

Además de estudiar Márketing y jugar en Tercera División, Iago de Santiago dirige al mejor equipo gallego de la liga «on-line» del FIFA, el Ferrol Hotspur

15 jun 2018 . Actualizado a las 10:41 h.

El Comité Olímpico Internacional reconoció hace varios meses los deportes electrónicos (e-sports) como «actividad deportiva». El sector está en auge y continuará creciendo sin parar en los próximos años. Eso sí, hay quien lleva la delantera. Iago de Santiago Piñeiro (Ferrol, 21 años) se enganchó con 11 años al FIFA, el juego de fútbol por excelencia, y desde entonces no lo ha soltado. De hecho, en el 2014 descubrió el apartado más profesional, con equipo y partidos on-line, una modalidad en el que ahora es una referencia a nivel gallego. Es el capitán del equipo Ferrol Hotspur, que milita en la segunda división española de la VFO, la Virtual Football Organization, que desde octubre del 2016 coordina la competición.

«Empecé a jugar en línea porque me gusta competir, como en la vida real. De la mano del fútbol siempre ha ido el FIFA», comenta Iago en el bajo de su casa de Ferrol, donde tiene su rincón de gamer, un ámbito en el que se le conoce con el usuario de @iago_crack. No obstante, no se pasa todo el día sentado, sino que su pasión por el fútbol tiene su origen, en verdad, fuera de la pantalla, como guardameta. Lleva jugando toda la vida. Pasó por el Mugardos, Racing de Ferrol, Atlético de Madrid, Albacete, Barnet (Inglaterra) y Unionistas Salamanca, antes de recalar en el Tordesillas de Tercera División, en el que estuvo la pasada temporada. Además, estudia segundo de Márketing y Comunicación en la Universidad Pontificia de Salamanca.

JOSE PARDO

«Muchos días entreno con el equipo y al llegar a casa, por la noche, echo unos FIFA», comenta. Como capitán del Ferrol Hotspur, se encarga de coordinar a los otros catorce componentes y elegir a los once que disputarán cada encuentro. «Es como en la vida real. Según el capitán vea si estás bien o no, juegas o no», explica. En este momento marchan terceros, a falta de un par de duelos para acabar la liga, en los que se decidirán los puestos para disputar el play off de ascenso. Esta competición la juegan de lunes a miércoles, mientras los jueves son para la copa. 

Nervios y concentración

El protocolo en cada duelo es muy semejante al que se puede ver en un campo. «Estás listo a una hora, entra todo el mundo, activamos el team speak para comunicarnos y empezamos», relata Iago. Participan once jugadores por equipo, además de los comentaristas y los espectadores. La diferencia está en que, antes del duelo oficial, disputan tres de calentamiento y al acabarlo, otro para relajarse. «En el partido importante todo el mundo está muy nervioso y concentrado», añade el portero, que cuando coge el mando suele ser mediocentro o central.

Aunque en el Hotspur al principio casi todos los componentes eran de Ferrol, ahora son de muchos puntos. De hecho, su nombre oficial actual es Daraya Ferrol, porque el Daraya, un club de e-sports murciano, los contrató para esta temporada. No obstante, continúan siendo un equipo amateur y por el momento hay muy poco es España que sean profesionales, al contrario que en otros países, como Argentina, donde ya existen torneos presenciales. «Si alguna marca nos patrocinase, cambiaríamos el nombre al instante», comenta Iago, que habla únicamente de «primas por victoria, en general, pequeñas ganancias» entre los que cobran.

«Creo que los juegos electrónicos van a ir a más. Cualquiera que tenga el juego puede hacerse un equipo y luego ir subiendo desde regional a primera. El modo on-line es más divertido y entretenido porque, a diferencia de jugar tú solo, estás con diez personas más», concluye Iago, que seguirá sumando más FIFA a su colección que va desde la edición del 2006 a la del 2018. «Al lugar donde me vaya, iré con la PlayStation conmigo», deja claro.

Un equipo con escudo y camiseta

Primero usaban el escudo del Racing, pero una vez se convirtieron en un equipo «más serio», crearon el actual. La base es similar, con una Cruz de Santiago, y le añadieron la bandera gallega y un gallo, al igual que lo tiene el Tottenham Hotspur. El fallecimiento de un compañero es el origen del lema «Nunca me olvidéis; yo nunca os he olvidado», una frase que él siempre utilizaba.