Iván Talegón exhibe en San Juan una curiosa exposición que reproduce a pequeña escala algunos de los pasos más significativos de las procesiones ferrolanas
12 abr 2019 . Actualizado a las 10:10 h.Para vivir la Semana Santa de Ferrol no hace falta esperar al Domingo de Ramos. Los forofos de los desfiles procesionales de la urbe naval pueden comenzar a sentir ya la emoción de ver los tronos, las imágenes y a los cofrades en el número 10 de la calle Cadaval de San Juan. Allí abre sus puertas O Café de Ana y, al entrar en su interior, el visitante se topa con la sorpresa: una auténtica Semana Santa en miniatura, con sus tronos, sus capuchones y sus portadores, todos ellos reproducidos a pequeña escala echando mano de tablillas de marquetería, goma eva, cartulina, escayola, espuma de obra y hasta alguna que otra lata de atún, entre otros materiales.
Detrás de esta pequeña obra de arte se encuentra Iván Talegón Balseiro, un joven de San Juan de 17 años, estudiante de segundo de bachillerato en el IES Leixa y un confeso apasionado de tres cosas: la pesca deportiva, las manualidades y la Semana Santa de Ferrol. A la primera le da rienda suelta echando el anzuelo al mar junto a sus compañeros del Club O Rodaballo, mientras que las otras dos han confluido en la muestra que estos días exhibe en su barrio.
«A él no le gusta nada darse importancia y ni siquiera ha puesto su nombre en el cartel de la exposición, pero la verdad es que lo que ha hecho es precioso y las personas que lo ven se quedan alucinadas, incluso aquellas que no tienen espíritu religioso», comenta Ana Picos, responsable de O Café de Ana y prima de Iván.
Fue ella, precisamente, la que lo animó a mostrar su obra por primera vez hace ya tres años. Y es que la primera Semana Santa en miniatura del joven que se pudo ver en el local se remonta al año 2017, aunque aquella creación era muy distinta a la que se puede ver estos días en el bar. «Poco a poco la fui mejorando y ampliando: en la primera exposición había muy pocos tronos y estaban hechos con cajas de latas de conserva. Al año siguiente ya los hice en madera y en la de este año los aumenté y les añadí muchos detalles», comenta Iván, que desde hace ya varios años sale a procesionar por las calles de Ferrol como miembro del tercio de Nuestro Padre Jesús Nazareno de la Cofradía de Dolores.
Según explica el joven, en su muestra se pueden ver varios tronos de tres hermandades: los de la Virgen de la Soledad y la Magdalena (Cofradía de la Soledad); los de la Virgen de las Angustias y el Nazareno (Cofradía de las Angustias); y los de la Virgen de la Piedad, el Cristo de la Misericordia, el Cristo Penitencial, el Cautivo, la Cruz Sudario, San Juan y la Virgen de Dolores (Cofradía de Dolores). «El año que viene espero hacer más tronos y completar la exposición con las dos cofradías que me faltan, la del Santo Entierro y la Merced», anuncia Iván.
Latas de atún
La mayoría de los tronos están fabricados con tablas de marquetería, aunque en algunos el joven tuvo que echar mano de otros materiales, como el de la Magdalena, en el que empleó latas de atún «porque es ondulado y ese efecto era difícil de conseguir con la madera». Con los varales (los palos que sobresalen de los tronos para ser elevados por los portadores), miden 35 centímetros de largo por unos 12 de ancho y no les falta detalle. Los portadores están hecho de escayola pintada, y los capuchones, de goma eva y cartulina. «Las únicas figuras que no hice yo son las imágenes de los tronos, que son compradas», comenta Iván, al que en San Juan también conocen por los preciosos belenes artesanales que monta en Navidad.
Quienes quieran descubrir la creación de este joven artista no tienen más que pasarse por O Café de Ana, donde estará expuesta hasta el 26 de abril. «He tenido que arrejuntar varias mesas, porque la muestra ha comido bastante espacio al local, pero vale la pena porque es una maravilla», dice Ana Picos echando flores a su primo.