Afal Ferrolterra activa, en colaboración con el colegio de O Feal, un proyecto que une a enfermos y pequeños con la pasión por los animales como gancho
29 oct 2019 . Actualizado a las 05:00 h.Tienen la llave para abrir corazones y arrancar sonrisas. Y para muchos son el mejor bálsamo contra la tristeza. Los niños del CPI O Feal y Nala, una perra de terapia, son las armas secretas con las que Afal Ferrolterra busca y consigue fomentar la inclusión social de las personas con alzhéimer y sensibilizar al conjunto de la población sobre la enfermedad.
Dos grupos de usuarios de los centros de día de la entidad, todos con este mal del olvido en fase inicial y con una afición manifiesta por las animales, y otros tantos de alumnos de tercero de primaria del colegio naronés participan en el programa denominado Aliados caninos. Un proyecto para el que se sentaron las bases el pasado curso y que trata de exprimir al máximo los beneficios asociados al contacto con los animales y a las relaciones intergeneracionales.
«Mentres non se coñecen, uns e outros interactúan pouco, pero despois a cousa vai cambiando. De feito, na última sesión -celebrada el pasado jueves en el colegio- os nenos xa se animaron a tomar a iniciativa e falarlles aos maiores. E ademais vense tamén avances en como se relacionan co can», explica Paula Neira, profesora y jefa de estudios de O Feal.
Facilitadoras
Nala y Selva, las perras de terapia, se convierten en el instrumento «facilitador» que propicia que las barreras entre ambos grupos de edad salten por los aires, tal y como explica Rebeca Freire, educadora social de Afal y experta en trabajo de terapia con animales.
«El hecho de que sean niños tan pequeños -apenas cinco años- hace que no sepan qué es eso del alzhéimer, que no juzguen a los enfermos y que estén mucho más abiertos a relacionarse con ellos», añade Freire.
Y al final, la relación fluye, la conexión va surgiendo y con ella las conversaciones. «Aos maiores encántalles falar cos nenos, explicarlles cousiñas e, por suposto, darlles mimos», señala la maestra, que explica que sus alumnos se sienten importantes en las sesiones y «sorprenden pola dozura que amosan».
Adiós a la apatía
El conocimiento de las emociones, las profesiones relacionadas con el medio ambiente y los animales, las necesidades de los mejores amigos del hombre o la importancia de una alimentación saludable son algunos de los asuntos que se trabajarán en los encuentros programados a lo largo de los nueve meses que dura este novedoso proyecto de Afal, que financia la Obra Social de La Caixa, y que se completa también con visitas al parque de bomberos o a la granja escuela Belelle .
¿Pero cuál es el objetivo final? «Más allá de objetivos cognitivos, lo que buscamos es, sobre todo, combatir la apatía en la que caen muchas personas con alzhéimer y romper su aislamiento social», detalla la técnica de Afal Ferrolterra.
El programa trata de acabar con el aislamiento que sufren las personas con el mal del olvido
«Nala» y «Selva» son los canes de terapia que rompen las barreras intergeneracionales