La romería de Chamorro reaviva la polémica sobre la talla de la Virgen y un potencial «Ecce Homo» en Ferrol
FERROL

La imagen religiosa, datada en el siglo XII y que se viralizó ante la alerta de una restauración irregular, ha vuelto a acaparar focos por su actual aspecto, que dista mucho del original
12 abr 2023 . Actualizado a las 23:32 h.La romería de Chamorro, celebrada este lunes en Ferrol, ha desempolvado la polémica sobre el actual estado de la Virgen, que ostenta el mismo nombre que la cita religiosa. Tres meses después de que los titulares de la ermita que alberga la talla de Nosa Señora do Nordés anunciasen su intención de cerrar el templo durante unos días para someter la imagen a un proceso de restauración y de que la Asociación para a Defensa do Patrimonio Cultural Galego diese parte de la situación a la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta, con la finalidad de evitar un potencial nuevo «Ecce Homo de Borja», paralizando los trabajos, la salida en procesión de la Virgen ha vuelto ahora a poner el foco sobre su aspecto actual.
En este sentido, una de las titulares del templo, Araceli Arias, manifestaba el pasado enero a este periódico que la idea era someter la imagen a un proceso de limpieza en la zona del rostro,que se encontraba ennegrecido por el efecto de las velas. Además, la propietaria del santuario explicitaba que la talla ya había sido sometida a actuaciones similares con anterioridad.
Según rememoraba Araceli, la última ocasión en que se trabajó para recuperar la imagen fue a comienzos de los años 90. «Acababan de rehabilitar el retablo cuando en abril de 1991, coincidiendo con la romería del Lunes de Pascua, se declaró un incendio en el interior del templo que afecto también a la talla de la Virgen», detalló la propietaria, que afirmó, además, que «en aquel entonces estaba mi tía como encargada de la ermita y recuerdo que hubo que volver a limpiarla por el efecto que tuvo el fuego sobre ella».

A tenor de este anuncio, el presidente de la asociación Apatrigal, Carlos Henrique Fernández Coto, puso la situación en conocimiento del departamento de Patrimonio de la Administración autonómica y la Virgen ferrolana se volvió viral en redes sociales. Poco después, desde la Xunta notificaron que la talla, datada del siglo XII, estaba integrada dentro del patrimonio cultural de Galicia y que, tras una comunicación con los propietarios del templo, la actuación sobre la imagen quedaba supeditada a la obtención de los permisos pertinentes del ente público.

Un revuelo inesperado
Los propietarios de la ermita, que manifestaron desconocer la necesidad de solicitar permiso alguno para intervenir sobre la talla al tratarse de un elemento de su propiedad, descartaron la posibilidad de iniciar de manera inmediata los trámites correspondientes para la rehabilitación tras el revuelo que se originó con su anuncio inicial.
En este sentido, desde Apatrigal destacaron en todo momento que consideraban que los titulares de la talla habían actuado «de buena fe» y que las irregularidades en el proceso eran fruto del desconocimiento. El propio presidente de la entidad, Carlos Henrique Fernández Coto, se ofreció en varias ocasiones a brindar asesoramiento gratuito en el proceso de recuperación de la talla.

En esta línea, el máximo representante de Apatrigal apuntaba el pasado mes a que el procedimiento requeriría de la adecuada selección de un restaurador, un pormenorizado análisis del estado actual de la Virgen y la posterior elaboración de un proyecto de actuación. Una vez salvados estos trámites resultaría necesaria la obtención de luz verde de Patrimonio y todo ello, apreciaba Hernández Coto, lleva aparejado meses de trabajo.
Sobre el coste de la restauración, que iba a ser asumido íntegramente por los propietarios de la ermita, los expertos de Apatrigal indicaban también que sería similar a la actuación que proyectaban realizar con anterioridad a la polémica. «Restaurar bien la talla de Chamorro sería igual de caro que hacerlo mal», aseveraba Hernández Coto al respecto.
Ojos de cristal, pelo postizo y maquillaje facial
A pesar de la intención de los actuales dueños de la ermita de no tocar la talla por el momento y esquivar la polémica, la romería de Chamorro ha vuelto a situar el foco sobre el actual aspecto de la imagen.
Y es que, tal y como subrayaban desde Apatrigal, poco queda del estado original de la misma, a día de hoy. Añadidos como los ojos de cristal que luce, el pelo postizo, la vestimenta o el maquillaje facial han ido deformando la concepción primigenia de Nosa Señora do Nordés.

Comparaciones con personajes de película de terror, una batería de memes de lo más diverso y un nutrido abanico de comentarios con retranca han inundado estos días las redes sociales, coincidiendo con la celebración de romería en la que, desde hace más de 350 años, los fieles acuden con exvotos de cera que simbolizan órganos o partes del cuerpo enfermas, en busca de la sanación y el cumplimiento de sus peticiones. Aunque, en esta ocasión, haya sido el propio estado de la talla el que ha acaparado los focos.
