
Los Maios atraen a andaluces en Ferrol, «esta gente está «sembrá», es muy bonito»
08 may 2023 . Actualizado a las 17:38 h.Canido, fiestero Canido. Desde el principio de los tiempos, el barrio de Ferrol exalta a la naturaleza y a la felicidad. Sobre todo con citas como los Maios, que este domingo culminaron con una gran comida popular en las calles, conciertos y miles de flores. Entre rosas, hortensias, claveles y margaritas, vecinos y visitantes bailaron, brindaron y posaron en esta fiesta primaveral. Incluso llegaron visitantes andaluces como las gaditanas Inmaculada Ramírez Muñoz y María del Mar Nieto Baena, que se montaron en un coche de flores: «Hemos traído al niño que entra de militar en Ferrol y nos encontramos con esto tan gracioso, ¡esta gente está sembrá!, es muy bonito, ¿pero para qué son estas mesas?».

Esas mesas se alinearon desde primera hora por la calle Alegre para desplegar tortillas y empanadas. Por allí se paseaba el escritor Antón Cortizas, vacilando sobre los orígenes de su pandilla: «Estes son cascarillas, ai que rica é a cascarilla!». Los aludidos lo negaban, «pero si somos do Muelle». Cortizas recuerda que «desde pequenos facíamos altares de Maios no portal con caixas, herbas e flores, e despois pedías o aguinaldo». Junto a las hermanas Eva y Mar Doce, celebraba «que o barrio teña a súa identidade». Cortizas da un titular: «Somos o barrio alto, con moito orgullo e mesmo cun toque da miña vivencia en Lisboa».

Entre los amigos de Cortizas, había un coruñés al que esta fiesta le trae «recordos de cando facíamos todo en comunidade, eramos felices e indocumentados». A la pregunta de si en A Coruña hay un barrio similar a Canido como Monte Alto, responde: «Pero se eu son do barrio das Flores que é moito mellor que Montealto!».

Ya en el Cruceiro, se preparaba para actuar el grupo musical de Lidia India. «Este barrio es maravilloso y una alegría, da gusto hacer red y ofrecemos a su gente una actuación llena de vida», indica su cantante. En tiendas regalaban bolsas de tela de los Maios, como las que llevaban Bibí y Mari. Con ellas charlaban Charo y Recho, que elaboraron figuras tan conocidas como el coche.

En una comilona, David Castro explicó que «cogemos comida en A Nogueira y los peques montan un Maio». Con el dinero recaudado en el aguinaldo, van a los coches de choque. Y la asociación Movilidad Humana, que asesora a mujeres migrantes, ofreció juegos y comidas de Perú, Ecuador y Colombia (como causas o arepas fritas). A Soledad Lucero, Valentina Paredes y Óscar Castillo los Maios les recuerdan «a fiestas de culturas como los mayas, donde honras a la Pachamama que es la Tierra que te lo da todo».
