Rei-Doval

Ramón Loureiro Calvo
Ramón Loureiro CAFÉ SOLO

FERROL

PACO RODRÍGUEZ

04 ago 2024 . Actualizado a las 14:55 h.

Me pregunto si mi amigo Gabriel Rei-Doval, que es amigo de una vida entera, un amigo verdadero (eso que Cunqueiro llamaba un «amigo irreprochable»), recordará aquel día, hace tantos años, en el que estando él y yo en Birmingham, esperando a Basilio Losada junto al campus universitario, vimos aparecer corriendo frente a nosotros, como por arte de magia, en el preciso instante en el que en nuestra conversación salía a relucir el nombre de Steve Cram (que fue el primer atleta que corrió un 1.500 en menos de tres minutos y medio), al mismísimo Cram, que por aquel entonces ya no hacía atletismo, pero que iba rodando a una velocidad más que considerable.

(Como me pregunto, también, si recordará los años en los que él mismo hacía atletismo, concretamente marcha atlética, y se entrenaba en el desaparecido estadio Manuel Rivera, del que ahora solo queda la leyenda).

Gabriel, que es de Mugardos —de O Baño, que fue el lugar en el que pisó por primera vez tierra hispana Mariana de Neoburgo, la esposa de Carlos II el Hechizado—, que reside en los Estados Unidos de América, donde es profesor de la Universidad de Wisconsin-Milwaukee, y que siente por Galicia un amor inmenso, acaba de publicar ahora, de la mano de Edicións Embora, un precioso libro, Cartas de Marco Polo e outros relatos. Una obra magníficamente escrita en la que nos comenta, por ejemplo, que «Wisconsin e Alaska están máis preto que Milwakee e Mugardos».

(Figura académica de referencia en el ámbito de la lingüística, Gabriel, que hace que Galicia sea más grande en el corazón que en los mapas, es, esencialmente, un narrador).