Con la colaboración de Roche Núñez, del restaurante Azteca de Narón, la diseñadora Ángeles Lozano inaugura el 6 de septiembre un espacio que aúna moda, accesorios, decoración, alimentación y licores
05 sep 2024 . Actualizado a las 12:00 h.Tras mucho tiempo vacío y sin vida, el número 60 de la calle Real —donde antaño funcionaron comercios tan emblemáticos como Rufo o Natalia Noguerol— está a punto de recuperar el pulso con una tienda en la que todos y cada uno de sus rincones remiten a México. Desde los bolsos con coloridos bordados que dan la bienvenida al visitante nada más cruzar la puerta hasta las botellas de mezcal, tequila y vino que reposan en sus estanterías.
Allí subirá la persiana el próximo 6 de septiembre (a las 19.00 horas) la primera tienda española de Angelozano, una marca mexicana de moda, calzado, accesorios y decoración que mezcla diseños contemporáneos con toques tradicionales. «Nuestros bolsos se confeccionan de manera totalmente artesanal en los talleres de marroquinería del estado de Guanajuato y los bordados que llevan están hechos a mano por mujeres de diferentes comunidades indígenas de Chiapas», explica a modo de ejemplo la creadora de la marca, Ángeles Lozano, que decidió bautizar su proyecto empresarial con la versión masculina de su nombre por una cuestión de «mercadotecnia» y por su natural inclinación «a no ser el centro de atención y pasar desapercibida».
Angy, como la conoce todo el mundo, comanda una tienda física de Angelozano en la ciudad de León, en el estado de Guanajuato, pero los artículos de su marca también se pueden encontrar en algunos de los hoteles más exclusivos de la Rivera Maya o en los almacenes Liverpool, algo así como El Corte Inglés mexicano. ¿Por qué eligió Ferrol para dar el salto a España? Pues nada más y nada menos que por su amistad con la diseñadora y emprendedora mexicana afincada en Ferrolterra Roche Núñez, responsable del restaurante Azteca de Narón. «Hace años trabajé para Angy en México y ya entonces le planteé la posibilidad de abrir una ‘tienda de experiencias' de su marca en Cancún. Se trata de un concepto novedoso y diferente que entonces no pudimos llevar a cabo porque vino la pandemia del covid y que ahora por fin hemos podido materializar con esta tienda en Ferrol», explica Roche.
Fue así como las dos diseñadoras idearon un proyecto que no solo ofrece los artículos de moda, calzado, bolsos, arte y decoración de Angelozano, sino también productos de alimentación que no faltan en ninguna despensa mexicana —como el mole en pasta, tortillas de maíz o chocolate para mesa—, además de mezcales, tequila, cervezas artesanales, vinos de la Baja California o los míticos refrescos de la marca Jarritos. Y no solo eso, sino también —y de ahí lo de la «tienda de experiencias»— una amplia programación de talleres, catas y charlas para que la clientela pueda conocer el origen y la tradición que se esconde detrás de cada diseño o licor. «No se trata solo de comprar y llevarse algo, sino de dar a conocer la cultura mexicana, porque México es mucho más que tacos y nachos», recalca Roche Núñez.
La inauguración oficial de la tienda tendrá lugar el este viernes, a las siete de la tarde. Angy Lozano ha trasladado su residencia de México a Ferrolterra durante tres meses para guiar los primeros pasos de su nueva criatura, pero a partir de entonces la cara visible de la tienda será la de Silvia Molina, ferrolana de cuna, pero con un corazón que late en verde, blanco y rojo. «Como dijo Chavela Vargas, los mexicanos nacemos donde queremos. Y yo nací aquí, sí, pero mi corazón es mexicano», comenta entusiasmada al poder trabajar en la sucursal ferrolana de Angelozano. «¡Esta tienda está padrísima!».