Los «héroes» de Navantia en Valencia

Beatriz García Couce
Beatriz Couce FERROL

FERROL

Los bomberos de Navantia Ferrol, junto a otros efectivos
Los bomberos de Navantia Ferrol, junto a otros efectivos Cedida

Seis bomberos del astillero ferrolano: «Nos dieron todo lo que tenían y más, comida, bebida, agradecimiento y cariño»

14 nov 2024 . Actualizado a las 23:31 h.

Pocos días después de que la dana arrasase Valencia, dos bomberos de Navantia Ferrol decidieron desplazarse a la zona para aportar su granito de arena en la recuperación de los espacios afectados. Sostienen que, ante las dudas de la empresa sobre su marcha y la negativa a cubrir su ausencia laboral y en caso de accidente, formaron un grupo con otros cuatro compañeros para acudir como voluntarios, asumiendo todos los gastos para ello. Los seis bomberos -Adrián Álvarez; Daniel Cenalmor; David Rodríguez; José Manuel Hermida; Miguel Martínez e Ignacio Rodríguez, este último jefe de la unidad en el astillero- llegaron en la mañana del pasado día 5, tras conducir toda la noche, y coordinados por la Axencia Galega de Emerxencias. «Toda la noche sin dormir, en la carretera, pero con toda la energía y ganas de empezar a ayudar, nos pusimos manos a la obra, sin descanso», explica uno de los trabajadores, que prefiere no dar su nombre porque lo hace por todo el grupo.

Lo que se encontraron fue el denominador común en muchos pueblos valencianos: «caos, sirenas, atascos, lodo y pueblos arrasados por completo». Junto a dos compañeros del GES de A Estrada, uno de Teo y del centro de formación Fuego y Mar empezaron a trabajar en la avenida de L'Albufera, que divide Sedaví y Alfafar. «Nos encontramos un pueblo valenciano que a pesar de verse totalmente arrasado por la dana, haber perdido sus hogares, sus negocios y en el peor de los casos, a sus seres queridos, se volcó con nosotros de una manera que nunca olvidaremos. Nos dieron todo lo que tenían y más, comida, bebida, agradecimiento, cariño y colaboración en lo que hiciese falta», recuerdan, ya de vuelta a sus puestos.

De hecho, se hospedaron gratuitamente en el hotel RH Byren y Spa de Gandía, cuyos propietarios asumieron todos los gastos para acogerlos. Como un bumerán, la aportación solidaria en las tareas de limpieza les fue devuelta en forma de un cariño inmenso por parte de los afectados. «Uno de los días, al llegar a la habitación del hotel teníamos unas gominolas con una tarjeta que ponía '¡Gracias! Sois unos héroes'», evocan. «Todo esto quitaba cualquier cansancio que pudiésemos tener y nos impulsaba a trabajar todavía más duro. Tanto fue así que los propios vecinos de la zona, por nuestro trabajo y el de varios equipos de emergencia gallegos desplazados en la zona, decidieron rebautizar la avenida como la avenida de los gallegos», añaden. 

Los trabajadores tuvieron que agudizar el ingenio para poder colaborar con las tareas de limpieza y achique de agua
Los trabajadores tuvieron que agudizar el ingenio para poder colaborar con las tareas de limpieza y achique de agua

Achiques de bajos, sótanos y garajes, rastreo y búsqueda de víctimas en garajes inundados, retirada de escombros, apertura de puertas y baldeos fueron algunas de las tareas en las que participaron los efectivos de la antigua Bazán, que inciden en que les hubiera gustado tener más respaldo de su empresa. Cuatro de los seis bomberos son buceadores profesionales, así que también realizaron trabajos en el puerto de Catarroja, ya que disponían del material acuático indispensable, En la biblioteca de Paiporta -zona cero del desastre- achicaron agua y limpiaron con la ayuda de otros servicios, el inmueble para ser utilizada como refugio para niños.

«Es un ambiente caótico, y aún siendo conocedores de la magnitud de la emergencia, notamos falta de coordinación y una mala organización, pero esperamos que sirva para aprender y no volver a cometer los mismos errores», subrayan, aún emocionados por toda la experiencia vivida en la zona. Una experiencia que no habrían podido tener sin el respaldo de sus compañeros en el astillero, que cambiaron turnos, aseguraron la prestación del servicio e incluso manifestaron su disposición a hacer relevos si fuese necesario. Valoran el trabajo codo con codo con el resto de bomberos y efectivos en la zona y especialmente del pueblo valenciano, que pese a la adversidad, se volcó con ellos.