El «rollazo» de la abuela Barbie ferrolana encandila a marcas internacionales: «Es inspiración»
FERROL
«Con 85 años está despegando su carrera. Está contentísima», destaca su nieta, autora de sus fotografías
01 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.La fotografía de un día normal «teñido de rosa» en la vida de Isabel Espiñeira y su marido Serafín Herrero, «Barbie y Ken abuelos», se convirtió en viral en las redes sociales hace un año. Detrás está su nieta, Elena, quien ya vio el potencial de sus cómplices abuelos cuando estudiaba diseño de moda y estilismo en A Coruña en el 2018. Ahora, cinco años más tarde y trabajando en Londres, disfruta fotografiando a su querida lela. «Con 85 años está despegando su carrera. Está contentísima, esto le entretiene y le gusta. Y tras cinco años haciendo esto está en su salsa», comenta Elena.
Y es que, lo que empezó como una colaboración con la nieta para la universidad y el perfil de Instagram @not_yourgranny como portfolio se ha convertido en una carrera en ciernes. «Nunca lo pensé. Empezó un poquito de broma... y mira tú ahora. Eso sí, yo tengo que verme bien, sino, ¡no poso!», bromea Isabel, que no duda que animaría a todo el mundo de su edad a lanzarse. «Yo soy un poco niña, la verdad, y me atrevo a todo. No me da vergüenza nada. Hay que mirarse en el espejo y quererse»», reivindica.
Tras empezar como un trabajo para Elena, ahora son las marcas las que contactan con ellas «para hacer colaboraciones y campañas». «Yo creo que ven en ella un nicho sin explotar. Parece que las marcas siempre escogen a jóvenes para campañas de maquillaje, ropa, productos del hogar... ¿Y qué nos queda cuando tengamos 60, 70 u 80 años? ¿No pueden tener aspiraciones? Me gustaría que mi abuela sea inspiración. Cuando se tiene una edad se puede ser igual de interesante», destaca la nieta.
Como estilista también valora el interés que despierta una persona mayor fuera del contexto socialmente establecido. «A las marcas les interesa poner en la imagen a una persona que se salga del contexto. Por ejemplo, una firma moderna», señala. Así, Isabel ya ha sido imagen de marcas internacionales como los relojes suizos de Daniel Wellington. «Hicimos dos campañas. Querían una imagen del pasado y presente, por lo que me pidieron que saliese yo con ella también en la campaña cuando lazaron su reloj digital», recuerda Elena. Otras firmas como la madrileña Doberman, el Market Smiley, la francesa Baron o la estadounidense Aimé Leon Dore también se han interesado por su abuela. «Recuerdo cuando le dije emocionada: ‘¡Lela, Aimé Leon Dore está dispuesto a hacer cosas con nosotras!’ Ella no tenía ni idea de que es, pero se lo toma todo en serio y disfruta», agradece Elena.
Isabel es toda una profesional. «Le tengo que contar muy bien lo que vamos a hacer porque ella quiere entenderlo para darme el rollo que pide la sesión o editorial. Es como tener una reunión de negocios con mi abuela. Mola mucho», bromea la nieta.