Dos barrios de As Somozas y A Capela rivalizan con Vigo en ambiente navideño

ANA F. CUBA FERROL / LA VOZ

AS SOMOZAS

La lavandera del barrio de O Coto, As Somozas
La lavandera del barrio de O Coto, As Somozas JOSE PARDO

La decoración y las luces de O Coto, Gunxel y A Estoxa atraen visitantes a diario

30 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Los vecinos han sido los artífices de la transformación navideña de los barrios de O Coto, en As Somozas; Gunxel, A Estoxa y al menos una vivienda de O Pazo, en A Capela. En O Coto, una preciosa aldea de casas de piedra restauradas, la idea partió de Marta Santalla y fue secundada por casi todos. Durante al menos un par de meses antes de la Navidad, se juntaron (sobre todo mujeres, de todas las edades) por las tardes para elaborar las piezas que decoran las viviendas y los caminos públicos, alguno muy estrecho, lo que contribuye a crear una atmósfera especial.

«Empezouse o ano pasado, cada un colabora no que pode, e este ano aumentouse co nacemento [con figuras de madera de dos mil kilos cada una talladas por Carlos García, de 2Duendes] e a iluminación do camiño que vai á fervenza natural, que ten quince metros de altura», explica uno de los participantes. El 8 de diciembre se inauguraron las luces, después de tres semanas de montaje. Desde entonces, los vecinos estiman una media de al menos cien personas al día curioseando entre guirnaldas, árboles o señales que advierten de la presencia de «renos soltos». No son Vigo, ni quieren, pero trabajan duro para cuidar su barrio y ofrecer una buena imagen.

En Gunxel, la Navidad se alteró en 2020. En plena pandemia, sin alternativas de ocio para los niños, a Beatriz Vence y a dos o tres vecinos más se les ocurrió «adornar, cada uno como quiere», los jardines, las fincas que rodean sus casas y las propias viviendas. Unos optaron por las luces y otros apostaron por crear figuras de madera. Vence se empeñó en que todas compartiesen algún elemento y un año pintó botas y zapatos de color rojo, y otro repitió la jugada con cajas de la fruta para colocar el calzado de la vez anterior. Este año tenía un plan que se ha frustrado por falta de tiempo y que espera retomar el que viene.

Son una decena de casas en Gunxel, a las que se han sumado varias de A Estoxa y al menos una de O Pazo, todo en As Neves. «Pusimos pueblecitos, un año un coro de madera... Hay cosas hechas (por niños y adultos) y también compradas, cada uno en su estilo», apunta otra vecina. Destacan los soldados de madera, los belenes y los Reyes Magos, la espectacular pareja de renos silueteados (con un fondo de abetos) y el simpático gallinero.

Este último es obra de Beatriz Vence y contiene un mensaje: «Quise gastarle una broma a mi marido. Tenemos cuatro gallinas y el año pasado se las comió el zorro dos veces, por eso puse cuatro gallinas y un zorro, y este año le añadí un gallo y los pollitos». Sin pretenderlo, han convertido el barrio en foco de atención, «sobre todo por las noches». La despedida, después de Reyes, será una chocolatada, por iniciativa de la Asociación Cultural Airiños da Capela.

Valdoviño premia los mejores adornos vecinales y de empresas

La Asociación de Veciños do Porto do Cabo ha sido la ganadora del concurso de decoración de Navidad impulsado por el Concello de Valdoviño, en la categoría de conjunto paisajístico y fachadas comunitarias, según determinó el jurado profesional. El segundo premio recayó en el Anpa Beiramar, del CPI de Atios. También dentro de la modalidad vecinal, Victoria Hermida y Carlos Grandal fueron los ganadores en jardines y cierres exteriores; y Verónica Guillén Losada e Irene Casal Castro, en balcones, puertas, ventanas y fachadas.

En cuanto al tejido empresarial, la vencedora ha sido Despeluxada y la segunda, la carnicería del supermercado DIA. La votación popular en redes sociales reconoció, tanto en Facebook como en Instagram, el centro de estética Bea Cobelo. En total, concurrieron 19 propuestas al certamen.