El fuel se esconde bajo la arena

La Voz F.?F. | FERROL

FERROL CIUDAD

X.?N.

09 dic 2002 . Actualizado a las 06:00 h.

Parecen playas sin mácula, pero el fuel está ahí, escondido bajo la arena, agazapado tras las rocas. A poco que se escarbe aparece una masa negruza, pegajosa, maloliente, mortal al fin. Lo dicen los empleados de Tragsa, que de esto saben mucho: «El problema está bajo la arena, aunque es imposible saber su magnitud». Lo dice también Jesús Busto, incansable escrutador de la costa. El responsable de la Surfrider Foundation está especialmente preocupado por las dunas y el río que desagua en el lago de Doniños. Ayer, en lugar de comer tranquilamente, aprovechó el tiempo del almuerzo para pasear por la arena y mostrar el daño que causó la primera gran oleada de fuel. Entre Outeiro y Penencia, justo en medio de la playa, las dunas disimulan, pero bajo la arena descansan toneladas del fuel letal que se descube al remover la vegetación. En el río, donde el Concello construyó una especie de dique arenoso con dos tubos, las orillas son oscuras, están manchadas de crudo. De momento, el lago está a salvo. Queda trabajo para meses. De hecho, Tragsa piensa ya en una segunda fase del plan de limpieza de la costa, aquella que se centrará en arrancar el fuel que impregna las rocas. Aún desconocen cómo se hará. Una posibilidad es lanzar agua a presión, pero este sistema, aclaran sus empleados, no impedirá que los restos caigan en la arena. Los técnicos dirán.