Artabria inaugurará en unos días sus instalaciones en A Gándara, que incluyen un horno crematorio
08 feb 2003 . Actualizado a las 06:00 h.«A este paso, el mercado terminará saturándose». Las palabras, pronunciadas por un empresario ferrolano del sector funerario, subrayan la proliferación de este tipo de servicios durante los últimos tiempos en la comarca, en la que se ha marcado una tendencia que culminará en apenas unos días con la inauguración del crematorio-tanatorio Artabria, en el polígono industrial de A Gándara. El nuevo edificio, propiedad de la empresa Pompas Fúnebres del Carmen y que queda ubicado en la zona ferrolana del polígono, duplica su número de salas (quince, frente a las ocho anteriores) y se suma a las instalaciones existentes en los hospitales Arquitecto Marcide, Juan Cardona y Naval.La oferta se incrementará todavía más en un año, plazo en el que espera habilitar un nuevo tanatorio una clínica privada ferrolana. En total, las salas de tanatorio disponibles en Ferrol se habrán duplicado con respecto a las actuales: así, los servicios funerarios parecen quedar perfectamente garantizados con más de treinta túmulos en un municipio, el de Ferrol, que, según datos recientes, ronda las 900 defunciones anuales y presenta una tasa de mortalidad ligeramente superior al diez por mil, un guarismo que entra en los parámetros normales. Fuera de la ciudad La apertura de tanatorios no es, en todo caso, exclusiva del área urbana, y de hecho varias localidades de la comarca cuentan también con nuevas instalaciones de este tipo: el último en abrir fue el de Pontedeume, mientras que en Valdoviño están en marcha las obras para hacerse con este servicio funerario. «Antes, las familias de Pontedeume y de otros municipios próximos tenían que desplazarse hasta Ferrol cada vez que se producía un deceso», señala un profesional del gremio, que augura una notable competencia entre las empresas del sector. Se trata de un mercado que mueve importantes cantidades de dinero y que en Ferrol parece haber colmado la demanda.