
El Borsalino abre sus puertas en el antiguo Galatea
18 dic 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Hasta hace bien poco, tomarse un café en el tramo de la calle Real que va desde Amboage hasta Armas era poco menos que una misión imposible. Exceptuando el Bla Bla y el Casino, ni un sola barra de bar ofrecía refugio al visitante en el corazón de la milla de oro de A Magdalena. Pero el café Borsalino ha llegado para poner fin a ese desierto hostelero. Inaugurado el pasado viernes, este nuevo establecimiento abre sus puertas en el local del mítico Galatea y se presenta ante el público como un café-bar donde lo mismo se puede tomar un buen desayuno que una cerveza o una copa cuando la cae la noche, además de disponer de una pequeña carta para picotear. Entre las propuestas destacan los burritos de pollo y los rollitos de carne y cerdo, dos especialidades de Honduras exportadas de su país por las responsables del local, las hermanas Sindy y Noemí González. La reforma quedó en manos de Ramón Montero, Carmen Pérez y Juan Filgueira, que han recuperado las pinturas ocultas de González Collado en las paredes y han utilizado borsalinos como originales pantallas en los focos de luz.