
La ciudad despidó el pasado domingo a Carmen Rodríguez Montero, quien el pasado 2 de marzo había alcanzado el siglo de vida
15 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Ferrol despidió el domingo a Carmen Rodríguez Montero, Carmiña para sus familiares y amigos, quien el pasado 2 de marzo consiguió lo que muy pocos logran: llegar a los 100 años con mucho humor y rodeada del cariño de los suyos. Aunque sus últimos años los pasó en la casa de su hija Carmen, cerca de la rotonda del Diapasión, esta mujer fuerte y voluntariosa siempre siguió muy ligada a Canido, su barrio de toda la vida, que tuvo que abandonar cuando derribaron su casa de la calle Alegre. El pasado mes de marzo, con motivo de su cumpleaños, Yeya, como la llamaban sus nietos y biznietos, revelaba la receta para llegar a los 100: «Hay que llevar una vida sana y afrontar los problemas con calma y serenidad cuando llegan». Su recuerdo perdurará.