Los hoteles salen de la hibernación

beatriz antón FERROL / LA VOZ

FERROL CIUDAD

En el Gran Hotel Ferrol se han colocado pegatinas en el suelo para marcar la distancia de seguridad
En el Gran Hotel Ferrol se han colocado pegatinas en el suelo para marcar la distancia de seguridad JOSÉ PARDO

Códigos QR , felpudos desinfectantes y marcas en el suelo son algunas de las medidas que están adoptando los alojamientos para su reapertura escalonada a partir del día 15

12 jun 2020 . Actualizado a las 10:16 h.

Los hoteles tenían autorizada la reapertura desde el pasado día 11 de mayo, cuando comenzó la fase 1, pero en Ferrol la mayor parte de los establecimientos han preferido esperar al final de la desescalada y la entrada en la «nueva normalidad» para recuperar su actividad. En la urbe naval, adía de hoy solo están en activo el Almirante, que reabrió sus puertas el pasado 1 de abril para atender a sanitarios y trabajadores esenciales y ahora está en proceso de transición para recuperar su funcionamiento habitual, y el Silva, que la semana pasada comenzó a alojar a viajeros de empresa y desde el próximo lunes atenderá ya al público general.

A estos dos establecimientos se sumarán de forma inminente el resto de hoteles de la zona, que reabrirán de forma escalonada a partir del próximo día 15. En esa fecha subirá la persiana el Gran Hotel Ferrol; el día 20 lo harán el Sercotel Odeón y el América; el 22 le tocará el turno al Valencia; el 25, al Parador de Turismo; y el Alda Suizo y el Real recuperarán el pulso el 1 de julio.

El Sercotel Odeón pondrá disposición de sus huéspedes  geles y mascarillas y cambiará las cartas físicas por un sistema de código QR para consultarlas desde el móvil
El Sercotel Odeón pondrá disposición de sus huéspedes geles y mascarillas y cambiará las cartas físicas por un sistema de código QR para consultarlas desde el móvil JOSÉ PARDO

En estos momentos, todos ellos trabajan en las medidas de seguridad e higiene que contemplan los protocolos de la Xunta y el Gobierno frente al covid-19. En el Hotel Sercotel Odeón, por ejemplo, se está preparando ya la instalación de mamparas en la recepción, así como la colocación de señales para marcar la distancia de seguridad y las «rutas recomendadas» en las zonas comunes y la disposición de alfombrillas desinfectantes en los accesos. «Además, todas las cartas físicas desaparecen y los clientes podrán consultar la carta del restaurante y del room service en sus móviles, gracias a un código QR», avanza Bibiana Reyes, directora del establecimiento de cuatro estrellas ubicado en A Gándara, cuyo spa no reabrirá hasta julio.

Reservados

Muchas de estas medidas se han implantado ya en el Gran Hotel Ferrol, donde también se utilizarán códigos QR para acceder a los registros de limpieza de las habitaciones y se crearán reservados dentro del restaurante mediante la colocación de mamparas entre las mesas. «Jugamos con una gran ventaja y es que nuestros comedores son muy amplios, por lo que no habrá problemas para mantener la distancia de seguridad», recalca el director, Gonzalo Jiménez, al tiempo que anuncia que el establecimiento estrenará terraza en la carretera de Castilla dentro de pocos días.

Aunque el escenario de los próximos meses en lo que respecta a la ocupación todavía es incierto, los teléfonos comienzan a sonar en las recepciones y alimentan una sensación de relativo optimismo. «En estos últimos días se ha notado más movimiento. Esta mañana, sin ir más lejos, un grupo de moteros llamó para reservar ocho habitaciones entre el 17 y el 19 de julio», comentaba ayer con satisfacción el encargado del Hotel Real, Francisco Javier Núñez.

También con esperanza mira al futuro próximo el responsable del Hotel Silva, Daniel Castrillón, quien vaticina una alta ocupación entre el 15 de julio y el 15 de septiembre, siempre y cuando no se produzcan rebrotes: «En Ferrol la incidencia del coronavirus fue baja, los precios son más asequibles y no hay tanta saturación como en el Mediterráneo y todo eso nos puede beneficiar a la hora de atraer al turismo nacional».

En Río do Pozo ya funcionan el Hotel Narón, el Valcarce y A Roldana 

Tal vez porque su cliente tipo es el trabajador de empresa y no el turista, los hoteles del polígono Río do Pozo han sido los más madrugadores a la hora de reabrir sus puertas. El Valcarce recuperó el pulso en la fase 1, mientras que A Roldana y el Hotel Narón lo hicieron en la fase 2.

En el primero la ocupación ronda en estos momentos el 50%, según apuntan desde la recepción, pero en los otros dos las llamadas para reservar aún no dan motivos para levantar el ánimo. «Llegan a cuentagotas, y es una pena, porque antes del covid, tenía todo lleno para agosto», asegura Brais Vilela, responsable de A Roldana, quien también constata que los clientes piden ahora más «facilidades» a la hora de reservar, como que no haya recargo por cambiar las fechas o por anulación. En el Hotel Narón, su responsable, Lino Novo, se lamenta de la situación del restaurante: «Antes servíamos 150 menús al día y ahora solo 30 o 40».