Los coches estrenarán el lunes el pavimento de hormigón de la plaza del Callao en Ferrol
FERROL CIUDAD
El vial reabre al tráfico un mes después del inicio de las obras con novedades: aparcamiento marcha atrás y zona de carga y descarga
20 may 2022 . Actualizado a las 22:51 h.La plaza del Callao recuperará la circulación el lunes después de un mes cerrada el tráfico para cambiar para siempre uno de los puntos neurálgicos de la circulación de la ciudad. Los vehículos rodarán sobre el nuevo pavimento de hormigón que sustituye a los hundidos adoquines que traían de cabeza a los conductores, pese a las distintas reparaciones realizadas en los últimos años.
El tránsito se restablecerá en el tramo final de la calle de la Iglesia, y con ello se reactivarán de forma inmediata las cámaras de vigilancia de la calle Rubalcava para evitar el acceso de vehículos no autorizados al entorno de la plaza de Armas.
El Concello consiguió reducir a un tercio el plazo de ejecución por el que se contrataron las obras —adjudicadas a la empresa Misturas— y que preveía tres meses de trabajos. El jueves se procedía al pintado de la señalización vial de la plaza y la concejala de Obras e Servizos, Ana Lamas, anunciaba en Radio Voz Ferrol (105,4 FM) la reapertura: «Al fin podremos disfrutar de una plaza que no se hunda», declaró.
Sin embargo, los conductores no serán los primeros usuarios de esta calzada. La plaza se abrirá en la tarde de este sábado a los peatones para que los participantes en la carrera solidaria organizada dentro de la Semana da Seguridade Viaria de Ferrol puedan discurrir sobre ella dentro del itinerario de cinco kilómetros previsto por el centro, entre las seis y las nueve.
Las novedades: aparcamiento marcha atrás y plazas para motos
La actuación incorpora distintas novedades. La primera, la eliminación de las plazas de aparcamiento en línea, que en realidad, no es tal. Según explican desde el Concello, la transformación de esa zona en carga y descarga representa el traslado de la que había en la primera manzana de la calle Lugo, por lo que las plazas se mantendrán, pero en esa otra vía. Pero además, a algunos viandantes les ha llamado la atención la inclinación de las marcas viales que delimitan ahora las plazas de estacionamiento en batería. Están pintadas en sentido inverso que hasta ahora, un aspecto que no es casual ni una equivocación. Con ello, se pretende forzar así a que los conductores estacionen sus coches marcha atrás, en lugar de hacerlo de frente. Es lo que, recuerdan fuentes municipales, establece el código de circulación para los aparcamientos en batería, garantizando así que la reincorporación a la circulación se produzca con visibilidad.
Al final de la hilera de una docena de espacios para aparcar se encuentran plazas de dimensiones más reducidas, destinadas al estacionamiento de motos.
La parada de bus amplía sus dimensiones y se extiende hasta el cruce, intersección incluida, con la calle Pardo Baixo, sometida a obras de reurbanización para convertirla definitivamente en una vía peatonal. Se busca evitar así los problemas que se producían cuando varios autobuses coincidían en esta parada.
Además, también se ha reubicado la plaza reservada para personas con movilidad reducida, que ahora se sitúa al final de la zona de autobuses, en aras, aseguran desde el departamento de Tráfico, de un emplazamiento que resulte más cómodo para quienes usen silla de ruedas.
Aunque lo previsto era que reabriese de forma conjunta con el Callao, finalmente la calle Lugo tardará unos días más. La concejala recordó que son obras independientes y transita por vías históricas, como Real y Galiano, por lo que «preferimos parar un poco y acotar muy bien esos detalles». No obstante, dice que la apertura será «inminente».