El presidente en Ferrol

Manuel Couce TRES APUNTES

FERROL CIUDAD

07 nov 2022 . Actualizado a las 23:58 h.

El presidente de la Xunta y el alcalde se reunieron para tratar de los problemas de este municipio, unos retrasados por motivos sin causa y otros por causa sin motivos. Deseamos que los acuerdos no queden esta vez en letra ahogada por los archivos, como sucedió cuando vino Feijoo. Y yendo al grano, importante fue el compromiso de la Xunta, asumiendo el saneamiento de la zona rural, la preocupación por crear suelo industrial, agilizara la residencia de O Bertón, y mejorarán el tren Ferrol-Coruña. Y todo ello en presencia de los pesos pesados de ambas administraciones, Martina Aneiros y Rafael Fernández, que verificaron con atención la letra pequeña de lo rubricado, aunque cuando sus jefes decían vamos hacer, ellos preferían escribir, vamos a realizar, que es más seguro. En fin no fue una presencia aurea, fue una reunión de trabajo para demostrar Alfonso Rueda, el interés que tiene por la prosperidad de estas tierras y su gente, y con Ángel Mato engrasar los mecanismos de ejecución de los compromisos adquiridos. Al decir Cabanas salta a la memoria su gran playa de aguas mansas y un pinar excepcional que atraen turistas de todas partes. Y es que la corporación que preside Carlos Ladra cuida con mimo hasta las raíces de aquellos majestuosos arboles. En la cosa municipal allí los socialistas se mueven como el pez en el agua, tienen admiradores incondicionales, y también algún que otro envidioso ¿y quién no? pero aquella gente sigue imperturbable su camino viendo como Cabanas es un pueblo que se quiere demasiado, florece lozana y ecuánime, allí no hay ningún desmadre, todos, vecinos y turistas se saludan y se sonríen, y suelen citarse en cafeterías donde se conserva el hábito sagrado de la lectura de prensa, para saber lo que pasa en el mundo. Naturgy tiene una oficina en la Plaza del Callao a la que a diario acuden marejadas humanas por que no entendemos la factura de la luz, muchos tienen que esperar en la calle a la intemperie, y no son precisamente gente con melena y barbita, son gente mayor. Me decía un señor con voz gangosa y pausada, y que estaba delante de mi en la larga cola, le pregunté por lo suyo y me dijo: Vengo con buena voluntad a pedir una explicación de este recibo, pero después de ver esto, me da ganas de llegar a casa apagar la luz, tirar el contador por la ventana y volver a las velas de cera.