Blanca García, concejala de Urbanismo de Ferrol: «Esto es como una montaña rusa»

Como aficionada al surf desde los doce años, Blanca García Olivares (Ferrol, 1997) está acostumbrada a sortear los embates del mar, pero en este mandato a la nueva concejala de Urbanismo, Accesibilidade, Vivenda e Rehabilitación le toca intentar mantenerse a flote sobre la ola de la marejada municipal. Arquitecta de profesión, en mayo daba el salto: del estudio en el que trabajaba en la empresa privada a la política. Y convirtiéndose, con 26 años, en la concejala más joven de la nueva corporación, asumiendo los «desafíos» de una ciudad y una cartera que sabe polémicas.

—¿Por qué tomó la decisión de sumergirse en la política local?

—Surgió de repente. Yo nunca había ido a un mitin ni a nada relacionado con la política. Un día me invitaron a ir a una charla sobre urbanismo en precampaña. Y al cabo de una semana, me llamó Jose [Manuel Rey Varela], me sentó en su sofá y me dijo: ‘¿Quieres unirte a la lista?’. Ya me dijo que era para concejala de Urbanismo, y que al día siguiente tenía que decirle algo. Tuve 24 horas para pensarlo con la almohada. Y finalmente, creo que esto es un tren que pasa una vez y asumí subirme a él.

—¿Es Ferrol una ciudad especialmente difícil?

—Difícil tampoco es la palabra. Ferrol es una ciudad donde hay mucha opinión: se opina de todo. Pero difícil, no. Hemos pasado malos momentos, pero ahora mismo viene una etapa bastante bonita tanto por Navantia como por la recuperación de los cascos históricos. La gente joven se está animando a comprar, a rehabilitar. Ferrol, y el barrio de A Magdalena, está de moda. La gente quiere venirse a vivir aquí.

—¿Está siendo como esperaba el aterrizaje?

—No pensaba cómo iba a ser. En el sector privado las cosas son diferentes, para mí es un mundo nuevo. Te levantas y esto es como una montaña rusa, nunca sabes dónde vas a estar, ni qué va a pasar. A mí me gusta estar a pie de obra; es donde hay que estar, no encerrado en un despacho. Las cosas se ven in situ, no mirando papeles.

—¿Le gustaría que los vestigios de la calle San Francisco quedasen a la vista?

—Tal y como alguno planteaba, pero no formalizaba sobre un papel, no. Pero haciendo las cosas bien, como podría ser desenterrándolos y montando las estructuras en otro sitio, por supuesto que sí.

—¿Y por qué lo cree inviable?

—Porque sería una obra que tendría que financiar directamente el Ayuntamiento, y a día de hoy no hay recursos. Si hacemos eso ahora mismo perdemos los fondos [europeos], porque no daría tiempo. A día de hoy es inviable, ¿pero que en un futuro se puede hacer? Por supuesto.

—¿Hay fondos para redactar el plan de urbanización del Sánchez Aguilera?

—Para nosotros fue una sorpresa que lo más importante del convenio con Defensa, que era el pago, no estuviese realizado. Es el primer paso para comenzar el desarrollo de este convenio. Lo único que tengo seguro es que Jose pagará todo el convenio: la primera parte en 2015 y la segunda, ahora.

—¿De qué forma se rebajará la muralla del Arsenal?

—Es una actuación que no solo depende del Ayuntamiento, hay más administraciones implicadas. Nosotros no podemos dar un paso sin tener su respaldo. Lo primero antes de proponer qué sistema se va a utilizar es sentarnos con las otras administraciones y valorar la mejor forma de actuar.

—¿Está encima de la mesa utilizar como aparcamiento la franja ajardinada paralela?

—Voy a contestar con un proyecto de nuestro programa: la creación de un carril bici desde A Graña hasta el Montón. El Puerto en septiembre comenzará las obras de su tramo, y su carril bici va a acabar en La Cortina. Por lo tanto, ¿por dónde lo vamos a poner?

—¿Tendrá su concejalía un director xeral de Urbanismo?

—Se está estudiando el nuevo organigrama para ver cómo se puede mejorar la gestión pública de esta casa y se tomarán las medidas necesarias para que sea una administración ágil y eficaz.

—¿Realmente va a haber una segunda playa en Caranza en este mandato?

—Está incluido en abrir Ferrol al mar y confiamos en que se pueda llevar a cabo.

—¿Cuál será el proyecto estrella del mandato?

—Hay dos: abrir Ferrol al mar y la ciudad del Deporte.

«Soy una persona que mira para adelante y que está aquí para trabajar»

«Es bonito estar día a día con los problemas de la ciudad, intentando solucionarlos», asegura Blanca García sobre sus primeros meses como concejala.

—¿Siente especial responsabilidad por ser la más joven de la corporación y llevar una cartera tan determinante?

—Ser mujer, tener 26 años y llevar Urbanismo recibe bastantes críticas, ya sean internas de otros grupos como externas. Pero soy una persona que mira para adelante y que está aquí para trabajar y sacar la ciudad adelante, no para hacerme fotos.

—¿Cree que Ferrol debe avanzar hacia la peatonalización?

—La peatonalización es una pieza clave, pero lo primero es enfocarlo en hacer un proyecto de ciudad y cómo queremos que esas calles sean peatonales. Poner una valla e impedir el paso de los coches no es una manera de peatonalizar un casco histórico. No puede ser que elimines plazas de aparcamiento y no des una alternativa. Antes de empezar a peatonalizar el tema de los párkings es algo fundamental. Y hacer un Plan de Movilidad.

—Precisamente fue el PP el que votó en contra del Plan de Mobilidade en el anterior mandato. ¿Se presentará uno nuevo?

—Por supuesto que habrá que estudiar implantar un Plan de Movilidad. Es necesario instaurar la zona azul y de residentes. Somos la única ciudad que no tenemos ese sistema. Valdoviño tiene zona azul.

—¿Cómo espera ver la ciudad dentro de cuatro años?

—Con una subida de habitantes, a ver si conseguimos darle la vuelta a esas gráficas, y con unos cascos históricos llenos de inversores. Al fin y al cabo, esa es la clave: Ferrol lo que necesita es gente que apueste por ella.

—¿Cómo le gustaría ser recordada como concejala?

—Como una buena persona.

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