Un letrado de oficio asume la defensa del acusado por el crimen de Cabanas: cobrará 400 euros al fin del proceso dentro de años
FERROL CIUDAD
Los abogados recuerdan que este caso es un ejemplo mediático de una situación que sufren a diario por las deficiencias del sistema, en un despacho profesional la labor de representar a Roger Serafín Rodríguez supondría una minuta de 6.000 a 10.000 euros
24 oct 2023 . Actualizado a las 12:24 h.Justo la jornada en la que detuvieron a Roger Serafín Rodríguez por el crimen de Cabanas cambiaba el turno de oficio en el partido judicial de Ferrol. Entre los tres nuevos abogados que tomaban el relevo estaba Cora Basoa, una letrada de Ferrol especializada en temas civiles, penales y laborales. Todos sus asuntos quedaron en suspenso durante el resto de la semana, porque el arresto del hombre que supuestamente había violado y asesinado a Elisa Abruñedo hace diez años copó todas sus horas y también le afectó personalmente, a pesar de su larga experiencia. La tarde del martes asistió al registro en la casa de Narón de Roger; al día siguiente pasó buena parte de la jornada en otro registro, el de su coche, y en un largo interrogatorio, hasta la noche, el que el hombre se declaró culpable.
«Es uno de los ejemplos de casos que llegan a través del sistema de justicia gratuita en los que empleamos muchas horas y, con mucha suerte, cobramos unos 400 euros al término del proceso, dentro de varios años y digo con suerte, porque si finalmente la administración no aprueba para el detenido un abogado de oficio, normalmente se declaran insolventes y entonces no cobramos ni de la Xunta, ni del cliente», resume Cora Basoa, que presentó su renuncia a este caso y un compañero la reemplazó.
Desde el miércoles por la mañana Juan Pablo Barros es el abogado de Roger Serafín, un caso complejo porque se investiga si puede estar implicado en otros crímenes. Queda mucha labor. Todo indica que Juan Pablo Barros será el letrado del encausado durante mucho tiempo: «Tendrá que ir varias veces a verlo a la cárcel, al juicio en la Audiencia y solo recibirá 30 euros por cada viaje, nunca compensa los gastos», reconoce Cora que recuerda que un caso como el del acusado de Cabanas supone una defensa por la que los despachos cobran entre 6.000 y 10.000 euros.
Otro lastre que sufren muy habitualmente los abogados de oficio es de las consecuencias de un caso que colean durante décadas incluso. Les siguen llamando para ejecuciones y cuestiones pendientes de un caso en el que se encargan de todo, hasta de completar el formulario en el que el cliente solicita a la Xunta el abogado gratuito y que la administración tarda varios meses en determinar si así es.
Ella percibirá menos de cien euros por las intensas jornadas que empleó en un caso que visibiliza los problemas que precisamente están denunciando los abogados del turno de oficio: «Los trámites deben ser más sencillos, debemos percibir más, antes, y poder cotizar como debería ser por un servicio que estamos prestando directamente a una administración pública», precisa una de las letradas que en Ferrol, al igual que en otras localidades, han creado una plataforma para defender sus derechos.