El chalé de Canido se convertirá en un hotel con encanto en 2025: «Es un símbolo de Ferrol»
FERROL CIUDAD
Tendrá nueve habitaciones, restaurante, jardín indiano y vivero hortofrutícola; a través del proyecto de As Built Arquitectura para el grupo La Penela
25 oct 2023 . Actualizado a las 05:00 h.En una sinfonía tricolor azul añil, beige y blanco, el chalé de Canido se alzará como hotel con encanto en el año 2025. Para esas fechas se prevé que se convierta en realidad uno de los proyectos más esperados en Ferrol. Desde As Built Arquitectura, los arquitectos Moncho Rey y Pedro Pablo Ríos confían en que la obra pueda iniciarse en el tercer trimestre de 2024. El grupo La Penela, propietario del inmueble desde 2017, creará aquí un hotel boutique con este reparto: restaurante en planta baja, cuatro habitaciones en la primera, otras cuatro en la segunda, y suite nupcial en las dos alturas del torreón.
«Es un símbolo de Ferrol ideado por Rodolfo Ucha Piñeiro, que construyó tantas obras maestras», recuerdan los arquitectos responsables del proyecto de reforma. De este modo el palacete de Canido, que estuvo unos años abandonado y con recuerdos a la obra pictórica de Edward Hopper, se convertirá en dos años en todo un atractivo turístico para la ciudad.
Con 740 metros cuadrados edificados y una finca de casi 4.500 metros, el chalé de Canido se alzó entre 1921 y 1925. Como buen ejemplo de la arquitectura indiana, se trata del sueño de un emigrante; Juan Sisto, que viajó con su padre y hermanos a La Habana para hacer fortuna... y cuyas iniciales pueden verse por toda la casa.
«La vivienda estuvo habitada por la familia Sisto hasta 2010 y sufrió ocupaciones hasta 2017, los que entraron ilegalmente se llevaron todos los detalles... pero la estructura y la calidad son tan buenas que mantenemos lo mejor», explican Moncho Rey y Pedro Pablo Ríos. Por ejemplo, una irrepetible escalera de pino de tea (el acero de las maderas, que se repite por los elementos más importantes de la casa).
«Nos encontramos en pleno proyecto de ejecución, las obras se iniciarán el próximo año y el hotel será una realidad en 2025», calculan los arquitectos. Aquí los visitantes podrán alojarse, tomar algo, comer, cenar o celebrar grandes eventos como bodas. La finca tendrá además un edificio de servicios para el hotel y un invernadero-estufa, con un vivero de fruta y verdura autóctona para el restaurante. Se conservará el jardín indiano, aunque algunos árboles como los castaños de indias ya han desaparecido.
«Y el espacio se abrirá al barrio con entrada de la parcela, recuperación de la relación visual entre el chalé, su jardín indiano y el entorno de Canido; mediante la apertura de los paños ciegos de cerramiento hacia la calle Alegre y hacia el parque», indican los arquitectos, «con un cierre metálico de forja entre pilastras».
Admiten desde As Built que La Penela ha encontrado aquí «una perita en dulce». Los dormitorios de la primera planta tendrán 25 metros cuadrados, se conservan las vidrieras de colores. Y el encanto de los años 20 estalla sobre todo en la futura suite nupcial, donde los novios podrán vestirse bajo el cielo de Ferrol.
El estilo inigualable de Ucha con guiños a Hopper: «Una casa única en la provincia»
Este futuro hotel boutique persigue «conservar la esencia de la edificación, adaptada a las necesidades actuales (domótica, accesibilidad ya que llevará ascensor) pero manteniendo su riqueza arquitectónica». Otro apartado vital del proyecto consiste en «contribuir al proceso de revitalización del barrio, iniciado hace años con Las Meninas y con la reurbanización promovida desde el Concello de Ferrol».
Desde que La Penela adquirió el inmueble en 2017, a partir de una idea aportada por As Built Arquitectura (estudio ferrolano), surgieron diversos obstáculos. Por ejemplo, se encontraron en lo alto del torreón «con un mirador en mal estado, que también se recuperará, y por donde entraban filtraciones». Recalca Moncho Rey que «se trata de una casa única en toda la provincia, es un proyecto muy interesante que beneficiará a Ferrol y a sus vecinos». En la zona noble, bajo y primero, vivía la familia; en las plantas superiores, dormían los niños y el servicio.
En cuanto a la calidad de esta obra de Rodolfo Ucha Piñeiro, «se trata de una pieza muy depurada y simbólica, muy bien proporcionada y con la impronta del arquitecto modernista» a partir del estilo indiano. ¿Por qué el chalé de Canido recuerda tanto al cuadro Casa junto a la vía del tren (1925) de Edward Hopper? «Hay muchas edificaciones de la época con el torreón en la esquina, hace cien años los creadores también se inspiraban a través de las publicaciones y se trata de una arquitectura representativa de esos años; el colonialismo americano incluía esa estructura con torre», explica Moncho Rey. Esa pieza de Hopper, por cierto, sí que inspiró claramente a Alfred Hitchcock en Psicosis.
Para este proyecto, el estudio ha caminado de la mano de Patrimonio y del Concello.