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El radar de A Malata se desplaza a su nueva ubicación

FERROL CIUDAD

En la foto, el radar en su nueva ubicación, solo unos metros más abajo de la anterior
En la foto, el radar en su nueva ubicación, solo unos metros más abajo de la anterior César Toimil

El dispositivo fijo de Ferrol se traslada al final del Acceso Norte para reducir la recaudación por multas, pero tendrá que ser reajustado antes de quedar operativo

06 feb 2024 . Actualizado a las 19:36 h.

El radar de A Malata ha iniciado la mudanza que se viene anunciando desde hace más de medio año. El único cinemómetro fijo de Ferrol, y el punto en el que más se multa, tras la desactivación en verano de las cámaras del entorno de la plaza de Armas, se encuentra en su nueva ubicación, aunque necesitará ajustes técnicos antes de quedar de nuevo operativo. El lugar elegido es el punto kilométrico 0,800 de la FE-15, el Acceso Norte, al final de la recta descendente y justo antes de la curva a la derecha en dirección al puerto.

Con ello, el gobierno local busca reducir el número de sanciones por exceso de velocidad que se generaban en su emplazamiento original, 125 metros más arriba de donde ahora quedó instalada la carcasa. Al mediodía, personal técnico realizaba las tareas para trasladar el aparato. Para ello, fue necesario cortar provisionalmente la parte de la calzada contigua a la mediana. Y acometer previamente las labores de cableado para dotar de suministro eléctrico la nueva ubicación, que ya quedaron completadas la semana pasada.

De la supresión a la reubicación

El PP prometió en campaña suprimir los «radares recaudatorios», en referencia a las cámaras de Armas y al dispositivo de A Malata, aunque una vez en el gobierno, el alcalde, José Manuel Rey Varela, matizó el compromiso reconvirtiéndolo en una reubicación con la defendió, se cumplía el objetivo de rebajara la recaudación por multas.

Por una parte, la aproximación a la curva promovida haría que de forma instintiva los conductores levantasen el pie del acelerador. Y por otra, dejaría de multarse en dos vías a la vez: la FE-15 y el vial de bajada hacia A Malata. Aunque la nueva ubicación coincide todavía a la altura de ese desvío, fuentes municipales sostienen que el campo visual alcanzará únicamente a los vehículos que circulen por la vía principal. La velocidad máxima seguirá siendo 50 kilómetros por hora.

El radar de A Malata se instaló en el año 2019. Y el pasado año impuso un promedio de quince multas al día, hasta sumar 5.403 en el 2022. Pese a ello, son un 22 % menos que las infracciones que registraba el ejercicio anterior, cuando prácticamente llegaron a 7.000. Desde su instalación no se registró ningún accidente en ese tramo, donde eran habituales los siniestros.

Los ingresos por multas descendieron un millón de euros

El 2023 dejó en Ferrol una recaudación global por multas un 39 % inferior que el año anterior. Según fuentes oficiales, si en el 2022 las arcas municipales ingresaron 2.651.230 euros por infracciones de tráfico en el ejercicio recién cerrado esa cantidad se redujo en más de un millón de euros, quedándose en 1.599.010 euros.

En ese período se redujo en un tercio el número de multas impuestas: 7.115 menos. Así, las 21.674 tramitadas en el 2022 se quedaron en 14.559 el año siguiente. Descendieron las detectadas por el radar, aun sin haberlo movido todavía del sitio, lo que el gobierno local atribuyó a un mayor conocimiento de su existencia por el debate suscitado a cuenta de su reubicación. Pero además, los cinco últimos meses del año ya no estuvieron operativas las cámaras que blindaban el acceso rodado a las calles del perímetro de la plaza de Armas, que entre la de la calle de la Tierra y la de Rubalcava pusieron 13.028 multas en 2022.